"Aznar está jugando con el riesgo de que ETA vuelva a las andadas"

Carlos Garaikoetxea cree que el presidente del Gobierno no está interpretando correctamente los ritmos de la pacificación que demanda la sociedad vasca y está preocupado porque en su opinión esos "errores" de Aznar pueden contribuir a que ETA "vuelva a las andadas". Presidente de Eusko Alkartasuna (EA) desde la escisión del PNV en 1985, augura un comienzo de año conflictivo con masivas manifestaciones en contra de la política penitenciaria del Gobierno central.Pregunta: ¿Usted aprecia contradicciones entre las declaraciones públicas del presidente del Gobierno sobre pacificación y su efecto práctico, el acercamiento de 21 del medio millar de presos de ETA?

Respuesta: Esa disquisición entre presidente y ministro, el bueno y el malo, no me ha convencido nunca. Los gobiernos son solidarios, y los presidentes responsables de sus políticas. Aznar se está equivocando si cree que ha puesto una pica en Flandes moviendo a 21 presos de los casi 600 que están alejados de su entorno. Comete un grave error. El acercamiento no es materia de trueque. Esto revela un error conceptual muy profundo. Un proceso de paz no puede estribar en unos movimientos tan tímidos. No pretendemos que haga una declaración tipo Downing Street , pero quedarse en este parto de los montes me parece el error de los errores.

P. ¿Qué futuro le augura al proceso de paz liderado por el lehendakari si, después de una legislatura en la que la demanda del acercamiento ha sido una constante y ETA ha declarado una tregua, el primer gesto de Aznar es mover a 21 presos?

R. Contemplo el panorama con gran preocupación. Creo que el Gobierno en primer lugar, y algunos partidos, están jugando con el riesgo de que se vuelva a las andadas, o que en el mejor de los supuestos entremos en una época de gran conflictividad política. Lo primero sería funesto y lo segundo muy grave.

P. O sea, que augura serias consecuencias sociales si el Gobierno mantiene esa política penitenciaria....

R. No quiero ser reiterativo. Pero su postura es realmente inmovilista. Temo que hay sectores muy reaccionarios que están condicionando en el entorno del Gobierno las actitudes del señor Aznar. Creo que no se da cuenta de la realidad social a la que se enfrenta.

P. ¿Considera importante o accesorio para seguir avanzando en el proceso la exigencia del Gobierno a ETA de que abandone definitivamente la violencia?.

R. Hombre, es importante que todos tengamos la convicción de que es definitivo, pero hay que evitar esos círculos viciosos que los filósofos llaman petición de principio, y que consiste en que, según el final al que se quiera llegar, se pone la premisa insoslayable. Existen. El propio Aznar ha dicho que existen indicios sólidos que merecen la pena tenerse en cuenta. Pues si lo ve, que haga lo demás. Porque hasta ahora la concepción que tiene del proceso es muy cicatera.

P. Es decir, que cree que no va a funcionar lo de paz por presos.

R. Si piensa que el binomio es ése, paz por acercamiento a estos ritmos de presos, me parece que no está en la realidad, no está en la realidad social.

P. ¿Qué medidas van a tomar para forzar el cambio de esos ritmos en la solución al acercamiento?

R. Si se mantiene esta actitud, yo lamento tener que augurar una gran convulsión en todos los ámbitos, tanto en la calle como en las instituciones vascas, porque no estamos dispuestos a que una fase tan esperanzadora, que nos ha costado mucho lograr, pueda ponerse en riesgo por algo que ni siquiera tiene que ser materia de trueque, sino de actitud consecuente con la propia ley.

P. Es decir, que la integración institucional de EH de la mano del nuevo Gobierno nacionalista no va a servir para frenar esa convulsión social y política que pronostica...

R. Bueno, es que el PNV y EA tienen convicciones propias a este respecto. En EA, que a diferencia del PNV hemos estado en contra de la dispersión desde sus orígenes, no tenemos ninguna inclinación a frenar protestas en ese sentido.

P. ¿No le preocupa que el futuro Gobierno nacionalista vasco nazca marcado por la conflictividad social y política?

R. A mí me preocupa que se esté creando un clima absolutamente desfavorable a esta nueva mayoría y a este Gobierno antes de que empiece a funcionar y sin darle los cien días de oportunidad habitual. Lo cual no hace más que confirmar nuestra sospecha de que, dicho a lo bruto, algunos preferían obtener beneficios políticos aún existiendo violencia que tener un escenario político en el que haya mayorías que no les gustan.

P. Ese argumento va a hacer que los cargos públicos del PP se suban por las paredes cuando han muerto por unas siglas. R. Me estoy refiriendo más a quienes han compartido labores de Gobierno en este país que al PP. De todas formas, tengo que decir que el acoso que ha sufrido el PP y sus gentes ha sido una de las motivaciones que a EA y a mí nos han llevado siempre a poner toda la carne en el asador para conseguir la tregua. Como también hemos hecho, aunque son cosas que no saltan a los titulares, por las víctimas del terrorismo.

P. ¿Cree que al presidente del Gobierno debería preocuparle que un partido como el PNV, que en su día apoyó la reinserción, ahora vaya a estar en la calle, inmerso en esas protestas?

R. Creo que sí, y también a sectores del Partido Socialista, e incluso amplios sectores sindicales que, a partir de ahora, van a presenciar ediciones más espectaculares de manifestaciones masivas contra esa política.