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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

La concertada

Esta no es confidencial. Sí lo era la grabación trincada furtivamente y con alevosía... decía: "Manuel, que cuantas más largas les des a los de la concertada, mejor queda el partido ante los votantes, tú sigue con el canto de la enseñanza pública que seguirán creyendo que no puede estar mejor...". (La voz era de un alto cargo del partido que es bajito, gordo y con bigote). Y Pezzi a moverse en su torre-puchero-pesebre y como gran patrón les dice a los representantes de la concertada que pidan mejoras a sus patronos de colegio... Él sabe muy bien que al rechazarlos cumple su otro papel de sumisión ante los padres rectores de cada escuela concertada. El consejero andaluz quiere ignorar la deuda de su partido con la educación que eleva la cultura del pueblo, que somos la mayoría, echando a pelear a unos trabajadores contra otros. Y quiere ignorar dos acuerdos de gobierno y dos leyes programáticas de educación, firmadas por su partido. La grabación seguía: "Además, parece que los sindicatos tienen problemas dentro, la mitad se les van y están montando una plataforma, mejor para nosotros". Era en mayo del 98... a 30 años del 68... Libertad. Igualdad. Fraternidad. ¡Cuánto ha llovido y qué poco hemos sembrado-avanzado! Porque los trabajadores de la Concertada tenemos derecho a la igualdad de condiciones de trabajo con los compañeros de la enseñanza pública por derecho y queremos que mejore toda la enseñanza de hecho. Pezzi: oíste consejos perversos y perdiste las gafas. EL 24 de noviembre hubo huelga. En diciembre, más días sin clase. Pezzi, has perdido. La división sindical que provocaste ha aumentado la protesta. Firma el calendario de homologación o vete. Porque tenemos razón. P.D.: La grabación es imaginaria, el resto no.- Roberto Madrigal Santiago. Mairena del Aljarafe (Sevilla).

Derechos Humanos

El pasado 4 de diciembre hemos celebrado en los centros docentes andaluces el 20 aniversario de la Constitución española, siguiendo las instrucciones emanadas de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía. Nada que objetar. Sorprende, sin embargo, el silencio frente a otra conmemoración también fundamental: el 10 de diciembre se cumple el 50 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos. Declaración que, además de inspirar a la propia Constitución española, supone en sí misma el germen de una Constitución mundial. Germen que todos debemos valorar y que se debería desarrollar en el futuro (con actuaciones como el Tribunal Penal Internacional, por ejemplo) para asegurar una progresiva igualdad de derechos a los ciudadanos del mundo frente a las dictaduras y fascismos de todo el signo y la voracidad del capital multinacional. El objeto de estas breves líneas es doble: por un lado, animar a los centros docentes a celebrar también este 50 aniversario, y, por otro, instar a la Consejería de Educación a que en el futuro celebre ambas fechas aprovechando la cercanía de las mismas y la fuerte relación existente entre estos documentos.- Juan C. Cobo Sánchez. Jaén.

El silencio de los hombres

Durante los últimos meses, por los medios de comunicación, hemos podido conocer el número cada vez más alarmante de casos de violencia doméstica, o sea, malos tratos de hombres a mujeres. También que las instituciones públicas están haciendo un esfuerzo por optimizar los recursos disponibles para las víctimas e incluso pretenden coordinarse y de ahí la firma del protocolo que tuvo lugar el pasado día 26. Ha habido, además, una importante movilización de asociaciones que ha culminado en la manifestación del día 25, y otras tantas acciones de menor resonancia. Pero todas con el mismo propósito de defender los derechos humanos y concienciar a la sociedad del tremendo daño que hacen los maltratadores, ahora y para el futuro. Porque ellos desestructuran la vida y la personalidad tanto de las mujeres como de los niños, que también son víctimas, y difícilmente una madre maltratada puede transmitir a sus hijos algo más que la desesperanza. En la manifestación hubo algún que otro hombre, otros pocos fueron espectadores ocasionales y el resto... ¿Dónde están los hombres? No se oye su voz clamar contra este delito y, sin embargo, cuando se trataba de impedir que las mujeres pudiéramos decidir por nosotras mismas la interrupción de un embarazo no deseado, multitud de ellos salieron a la calle, vociferando, incluso desde los púlpitos. ¿Será que no les importa que nos peguen? ¿Estamos rodeadas de bestias dominadoras? O simplemente es que retransmitían un partido de fútbol a la misma hora y seguramente ya tenían la cena preparada por esas mujeres que, en la calle, solas, gritaban contra una de las peores violencias: la que ocurre en el seno familiar. Me gustaría escuchar su voz, pero no como lo hace el señor Arenas (PP) que cada vez que habla es para marcarse un tanto con las mujeres a costa de ningunear a otra mujer, su colaboradora Amalia Gómez, que es la que trabaja de verdad. Me gustaría escuchar la voz de los hombres denunciando a sus congéneres y oírles en la lucha por la igualdad y los derechos humanos. Me gustaría que gritaran algo más que ¡goool!- Carmela Gálvez. Sevilla.

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