Impresionada
Soy una enfermera que ha estado durante cierto tiempo conviviendo en una comunidad kekchí en Guatemala, haciendo labores de acompañamiento y aportando mis conocimientos en octubre, antes del huracán Mitch. La verdad es que vengo impresionada, pero no por su miseria, falta de infraestructuras, etcétera (que ahora serán extremas), sino por su generosidad, sus ganas de luchar, por su alegría y otros muchos valores.Me alegro de que la respuesta de los españoles ante esta catástrofe haya sido inmensa, pero me gustaría hacer un llamamiento y es que nuestra solidaridad no sólo fuera "espoleada" por los medios de comunicación, sino que fuera una constante en nuestra vida diaria (no debemos olvidar que a este último problema se añaden los de Sudán, Bangladesh, India, Ruanda, etcétera).
Ahora que llegan las navidades y vendrán las múltiples compras, deberíamos plantearnos un cambio de actitud: ¿necesito comprar tanto?, ¿qué hay detrás de mis compras?, ¿los salarios de los trabajadores son justos?, ¿hay explotación laboral infantil?, ¿las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres?... Este cambio de actitud beneficiaría de verdad a los países del Sur. No se trata de boicotear, sino de "decir" a las multinacionales que traten mejor y de manera más justa a los trabajadores de sus maquilas del Tercer Mundo. Esto, junto con una actitud más justa de nuestros Gobiernos como dar el 0,7% del PIB y la condonación de la deuda externa, mejoraría mucho las cosas.
Creo que merece la pena luchar por un mundo mejor. Las sonrisas de Blanca, Rubén,Byron, Velusio y tantos otros que he conocido y están en mi corazón, lo merecen.- . .
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