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Gil y Gil ya tiene vía libre

Antonio Jiménez Barca

Las protestas de los vecinos de la zona no han variado el destino final de dos parcelas pegadas al campo Vicente Calderón, del Atlético de Madrid. La comisión municipal de Urbanismo dará hoy el visto bueno para que Jesús Gil y Gil, alcalde de Marbella, dueño y presidente del Atlético de Madrid, pueda edificar en esa zona 302 pisos, lo que supondrá un beneficio próximo a los 2.000 millones de pesetas.La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos y la asociación La Unidad, de Arganzuela, alegaron y defendieron el uso original de las dos parcelas, destinadas a zona verde. Pero el Ayuntamiento no les ha hecho caso. El municipio recalificó estas dos parcelas en 1997 a modo de compensación: antes había permitido al Real Madrid edificar un centro comercial en el Santiago Bernabéu, la denominada Esquina del Bernabéu, que generó para el club blanco unas plusvalías de 2.000 millones.

El Atlético de Madrid deberá, eso sí, construir un aparcamiento subterráneo de unas 500 plazas y mejorar ciertos accesos de la M-30. Una vez pasado el trámite de la comisión de Urbanismo, el pleno municipal aprobará esta operación. A partir de entonces, es decir, en diciembre, el club podrá contratar ya las obras. El concejal socialista José María de la Riva aseguró ayer que su grupo está a favor de la operación en general, pero que hay un punto que le huele mal. "Se tendría que asegurar el Ayuntamiento de que el dinero de las plusvalías generadas por los pisos de lujo va a parar al club rojiblanco y no, por ejemplo, a alguno de los negocios de los amigos de Gil y Gil en Marbella".

¿Y cómo se consigue eso? "Es fácil: especificando por convenio que el dinero ingresará en una Fundación Atlético de Madrid", respondió el edil socialista. El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, del PP, no está de acuerdo: "No se puede exigir eso, seamos serios. La operación beneficiará a la ciudad por dos motivos: primero, porque beneficia al Atlético de Madrid, que es parte de Madrid, y segundo, porque se arregla una zona de la ciudad. Y que no se preocupen los vecinos, porque, tal y como está diseñada la operación, van a existir zonas verdes", aseguró el edil de Urbanismo. En el convenio se expresa que Gil y Gil dispondrá de aproximadamente 30.000 metros cuadrados para edificar casas, pero que tendrá que dejar para zona verde pública un terreno de unos 15.000 metros cuadrados.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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