La oposición califica de "circo" las quejas del presidente

"Circo, espectáculo, burla al Parlament". Con estos calificativos la oposición cargó ayer en el Parlamento catalán durante el pleno del debate de presupuestos para 1999 contra las declaraciones hechas la víspera por el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reclamando en un acto multitudinario ante empresarios un pacto fiscal para que Cataluña recaude el 100% de los impuestos a partir del año 2001. La sensación dominante en la sesión era de final de etapa, según reconocían diversos parlamentarios. Con la perspectiva de que se adelanten las elecciones autonómicas al próximo mes de marzo, la oposición colocó en el estrado a sus primeros espadas, en lugar de los portavoces económicos. Hacía tiempo que no subían a la tribuna para hablar de presupuestos el jefe de filas del grupo del PSC, Joaquim Nadal, y el de Iniciativa per Catalunya-Els Verds (IC-EV), Rafael Ribó. Al consejero de Economía, Artur Mas, le tocó aguantar las críticas en el banco del Gobierno, que estuvo casi todo el día desierto.Las críticas de la oposición se dirigieron no tanto hacia la necesidad de un nuevo modelo de financiación que mejore los ingresos de la Generalitat como al hecho de que Pujol lo proclamara la víspera en un acto multitudinario. Para el presidente del grupo parlamentario socialista, Joaquim Nadal, "el anuncio solemne del pacto fiscal es una provocación a este Parlamento y una demagogia de cara a los ciudadanos".

Distraer la atención

Ribó y el diputado de Esquerra Republicana Josep Huguet también cargaron contra Pujol. "Se ha montado un escenario para distraer la atención de esta cámara, un circo montado horas antes de este debate", dijo Ribó. Y añadió: "Somos partidarios de un pacto fiscal para salvar el caos que existe por la mala gestión, por la falta de suficiente financiación y por el endeudamiento". Huguet estuvo igualmente duro y acusó a Pujol de haber actuado de espaldas a la comisión parlamentaria creada a iniciativa de su grupo "para estudiar las necesidades de financiación" a partir del análisis de la balanza fiscal catalana respecto a España.Al consejero Mas, que acudió a defender el presupuesto, le tocó defender a Pujol. Para rechazar las acusaciones de Nadal, Mas utilizó unas recientes declaraciones de Pasqual Maragall, el candidato socialista a la Generalitat: "Su candidato se ha puesto al lado del Gobierno de la Generalitat en este caso. Lo agradecemos porque es el reconocimiento de las insuficiencias financieras de la Generalitat".

Por su parte, el líder de Unió Democràtica, Josep Antoni Duran, reclamó en Valencia, tras entrevistarse con el presidente Eduardo Zaplana, que el Gobierno "de una vez por todas, publique las cifras de los balances fiscales, porque a partir de ellas se verá si somos solidarios o no con nuestras propuestas".