El PP quiere que se aprueben todas sus enmiendas a los presupuestos

El PP catalán pagará con la infidelidad a CiU las traiciones de los convergentes en el Congreso de los Diputados, donde en los últimos días han votado de manera reiterada algunas de sus enmiendas a los presupuestos con los socialistas. El presidente de los populares catalanes, Alberto Fernández Díaz, advirtió ayer al consejero de Economía, Artur Mas, de que la coalición nacionalista deberá aceptar "todas las enmiendas que está impulsando el PP al presupuesto". De esta manera, el partido conservador paga a CiU con la misma moneda el plante que hace 10 días realizó la coalición nacionalista ante el Gobierno central al apoyar una enmienda a los presupuestos generales del Estado presentada por el PSOE. Alberto Fernández Díaz explicó en Sant Andreu de Llavaneres (Maresme), única localidad catalana gobernada por el PP, que su partido y CiU ya han llegado a un acuerdo "sobre las grandes cifras" de los presupuestos para 1999. Sin embargo, el PP asegura que "ese acuerdo inicial se tiene que complementar con un acuerdo definitivo que supone la aceptación por parte de CiU de una serie de enmiendas sobre el territorio y de diversas políticas sectoriales, muy en particular en cuestiones sociales". El consejero de Economía, Artur Mas, respondió ayer mismo a las declaraciones de Alberto Fernández Díaz. Según el responsable de finanzas de la Generalitat, "el PP no puede pretender que todas las enmiendas que presente o que negocie previamente con el Gobierno sean automáticamente aceptadas". En opinión de Artur Mas, que visitó la Hortimostra, que se celebra en Vilassar de Mar, los populares "tienen que ser consecuentes con la voluntad ya expresada de no poner dificultades a los presupuestos de la Generalitat para 1999". El PP quiere acabar la negociación de los presupuestos en un mes, pero exige que CiU acepte sus enmiendas para dar su apoyo. El partido conservador quiere "expresar su influencia en la redacción final de los presupuestos".