Anguita: IU "se ve recompensada" por la decisión de hablar con ETA

Izquierda Unida "se ve recompensada" por la decisión del presidente del Gobierno, José María Aznar, de iniciar contactos con ETA. Así lo manifestó ayer su coordinador general, Julio Anguita, que recordó que planteó esta medida a Aznar, "entonces reticente a ella", durante su entrevista del 23 de septiembre en La Moncloa. "Resulta vergonzoso tener que soportar una presión sin cuento por parte del PP y de los medios de comunicación para, a los 45 días, comprobar que nosotros llevábamos razón", declaró Anguita.

Según Anguita, Aznar está demostrando "ser práctico" en este asunto, ya que "va recogiendo" algunas propuestas "sensatas" de otros partidos, aunque "con el tiempo suficiente para que parezca que se le han ocurrido a él". Está pasando, puntualizó, del "no, no y no" a poner en marcha lo que sus interlocutores le sugieren.

Para el líder de IU, la decisión adoptada no es más que "el cumplimiento del punto 10 del Pacto de Ajuria Enea", reclamado con insistencia por su organización. "Nunca es tarde", recalcó, "pero aquí hay una fuerza [por IU] que, al tomar las cosas con seriedad y reflexión, se ve recompensada por su aplicación aunque sea con cierto retraso". Por el contrario, Anguita criticó la actitud de los socialistas tras la tregua de ETA y aseguró que "se han quedado completamente fuera de juego".

El "problema político" del País Vasco, añadió, ha de ser afrontado mediante el diálogo entre todas las formaciones y su único límite debe ser "el que marca el derecho". En ese sentido, insistió en que "la Constitución no puede suponer un impedimento para solucionarlo" y en que IU defiende la autodeterminación como una opción "para todos los pueblos de España". En su opinión, "no llegará junio sin que esa cuestión no esté asumida, si no como tal, sí en parecidos términos, por Aznar".

Anguita afirmó que los votantes del PP "han tenido que ir yendo detrás de la línea que les ha ido marcando la situación del presidente del Gobierno". "Desde luego", concluyó, "el diálogo promovido con ETA era impensable para ese electorado".