Las multinacionales

Llegaron como Papá Noel, ofreciendo trabajo, un bien escaso por estos pagos. Porque nuestros ricos son pocos y no están por la labor. Lo de invertir en actividades productivas nunca ha estado bien visto por las oligarquías de este país. Es más fácil la Bolsa y la especulación y, además, los títulos mercantiles no hacen huelgas, ni huelen a sudor y a cazalla, como los obreros.Como consecuencia -un poco- de todo esto, nuestro país se ha convertido en el paraíso de las multinacionales.

Pero estas empresas no vienen a regalar nada a nadie, sino en busca de mano de obra barata, o más barata que en el resto de Europa y del mercado hispano, muy bueno, por cierto, porque para comprar sí servimos. Y no están dispuestas a aguantar ni un pelo. Convenios sí, pero sin pasarse. Representación sindical, sí, pero mientras no obstaculice los planes de la empresa; no importa que sean tercermundistas, eso no cuenta. Hagas lo que hagas y tengas la categoría que tengas, al llegar a los cincuenta estás de más en la empresa y ya puedes hacerte a la idea de que tu último destino son las ventanillas del Inem, donde, una vez autorizado el despido por las autoridades laborales, no querrán saber nada y te tratarán como a un desecho.

Los Gobiernos tampoco querrán ponerle el cascabel al gato, porque tienen mucho que perder y nada que ganar. Lo que sobran son obreros. Y todo lo demás es política, lírica, o lo que ustedes quieran. Pero la realidad es ésa y no va a cambiar por lo que nosotros pensemos...-