El PP atribuye a una "mano negra" la inspección en la Diputación de Lugo

El presidente de la Diputación y del PP de Lugo, Francisco Cacharro, atribuyó ayer a una "mano negra" del PSOE la decisión del Tribunal de Cuentas de abrir una investigación sobre la contabilidad de ese organismo. Ni el tribunal ni el Consejo de Cuentas de Galicia han podido fiscalizar hasta ahora los balances económicos de los últimos ejercicios de la Diputación de Lugo por los retrasos en la entrega de los documentos. Tales retrasos, según aduce Cacharro, se han debido a cambios en la plantilla de funcionarios del organismo, en su sistema informático y en su modelo de contabilidad.

"Hay una mano negra", declaró Cacharro, "que intenta llevar al Tribunal de Cuentas una imagen que no se corresponde con la realidad. Pretende desacreditar al PP y a esta Diputación, porque creen que con ello pueden ganar las elecciones". El dirigente popular aseguró que "se está convirtiendo un asunto técnico en un problema político" y aseguró que incluso le satisface que se auditen sus balances porque así "se podrán subsanar errores en el futuro". El Consejo de Cuentas de Galicia ha precisado que este año también fiscalizará por vez primera los presupuestos de la Diputación de Lugo y desmintió que la decisión del Tribunal de Cuentas del Estado de examinar los anteriores ejercicios económicos se deba a una supuesta dejación de funciones de los auditores de la comunidad autónoma.

Por otra parte, Cacharro anunció que el alcalde de O Vicedo, Isaac Prado, del PP, procesado por varios delitos de malversación de fondos públicos, no se presentará a la reelección. Prado envió a Cacharro una carta anunciando su renuncia por "motivos personales y de salud".