La deuda se esconde en las empresas

Los especialistas en presupuestos del PP siguen escondiendo la deuda de la Comunidad de Madrid en las empresas públicas. La oposición lleva tres años calificando esta operación de "centrifugación de deuda" y acusando al Gobierno de trasladar un grave problema a las empresas públicas para poder cumplir los criterios de convergencia europea, que sólo consideran la deuda reflejada en la Administración regional y sus organismos autónomos.El proyecto de ley de presupuestos regionales para 1999 establece en su artículo 30 las posibilidades de endeudamiento de las empresas públicas. Por las cifras que se reflejan en el texto, las posibilidades son grandes, cerca de 78.000 millones de pesetas podrán pedir seis empresas autonómicas a los bancos durante 1999. Mientras tanto, para el resto de la Administración regional, el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, tan sólo ha previsto solicitar 43.817 millones de pesetas.

Sin la deuda prevista para las empresas públicas, el proyecto de ampliación del metro fracasaría por falta de liquidez. Arpegio, la empresa autonómica que financia la construcción de nuevos kilómetros de suburbano, puede pedir prestados a los bancos este año hasta 42.993 millones de pesetas. Sin la ayuda de los bancos, tampoco podrían levantarse nuevas viviendas, pues el organismo encargado de este trabajo, el Ivima, no podría pagar a las empresas constructoras. Para 1999, el Ivima podrá pedir prestados 13.268 millones.

El Canal de Isabel II, la empresa más rentable de la Comunidad de Madrid (este año ganará cerca de 2.500 millones de pesetas), volverá a endeudarse en 1999 (el límite fijado en el proyecto de ley es de 9.000 millones de pesetas). Una empresa con tantos beneficios tiene que acudir a los bancos para pedir prestado un dinero que, más tarde, devuelve a la Administración regional en pago por infraestructuras hechas hace años.