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El pasaje de los barcos tendrá que ser contabilizado mecánicamente

La Administración de Marina, forzada por una directiva de la Unión Europea, obligará a partir del 1 de enero de 1999 a todas las embarcaciones de pasajeros a instalar sistemas mecánicos o fotoeléctricos para contabilizar el número de viajeros que llevan embarcados en todo momento. Representantes de la dirección de la Marina Mercante convocaron el viernes a los capitanes marítimos, los encargados de velar por la seguridad de la navegación, a una reunión en Madrid para dar consignas de extremar los controles de los barcos a raíz del naufragio de una barca de recreo de pasajeros el pasado día 7 en el lago de Banyoles (Girona) que, tras una concatenación de graves errores, acabó con la muerte de 20 jubilados franceses.Marina Mercante, organismo dependiente del Ministerio de Fomento, se ha visto salpicada por el gravísimo siniestro de Banyoles, ya que la barca que naufragó no tenía ningún tipo de permiso, no había pasado ningún tipo de control y navegada por el lago cobrando a cada uno de sus pasajeros, sin que la Administración se diera por enterada ni de su existencia ni de su actividad lucrativa. El luctuoso accidente ha destapado la inseguridad en la que navegan algunas de estas embarcaciones recreativas y algunas naves grandes de líneas regulares.

Plácida reunión

En la reunión del pasado viernes estaban también presentes representantes de la asociación de embarcaciones menores de pasaje. Una nota oficial de la Dirección de la Marina Mercante describe el encuentro como una plácida reunión en la que se intercambiaron "puntos de vista sobre las actuales normas y procedimientos de control de seguridad" y en la que se explicó la nueva directiva de la Unión Europea.La citada instrucción obligatoria afecta directamente a los barcos de recreo turísticos. Además de exigirles los controles mecánicos para conocer el número de pasajeros que llevan, especifica claramente que la embarcación debe tener "medios visuales para que los viajeros conozcan el número total de pasajeros que puede llevar la embarcación".

Asimismo, para garantizar la seguridad del pasaje -incluso la psicológica- la embarcación debe llevar en lugar visible las licencias y los datos -"incluida la fotografía"- del patrón que la manda. La directiva comunitaria insiste en que, antes de la salida del barco, "se deberá disponer del número exacto de pasajeros que han embarcado."

La Unión pide, además, que los pasajeros conozcan aspectos de la embarcación como su nombre, la situación de los elementos de salvamento, los avisos de alarma y el número de tripulantes exigidos. Marina Mercante añade de su cosecha que esta exigencia ya la cumplen las embarcaciones, pero insiste en este aspecto "porque comercialmente resulta positivo el que los pasajeros conozcan todos aquellos aspectos y bondades de la embarcación que la diferencia de la competencia."

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