Getafe dice ahora que se tomará su tiempo para unirse al Plan de Basuras

Pedro Castro echó ayer el freno. El alcalde de Getafe (143.000 habitantes) aclaró que la incorporación de su ciudad al Plan Regional de Residuos se encuentra sólo en fase de "negociaciones", y vinculó su aceptación del plan a la entrada de los demás grandes municipios de la zona sur. Castro admitió que el Plan le parecía "positivo", pero insistió en que los municipios sureños tenían que asumir "criterios homogéneos para entrar todos a la vez".El regidor capeaba así el temporal que sus palabras habían generado en el seno de la Federación Socialista Madrileña. Este diario publicaba ayer las siguientes declaraciones textuales de Castro: "Ahora no tengo derecho a oponerme, porque la Comunidad está ofreciendo un servicio a los ciudadanos con el compromiso de que no nos costaría nada. Si no nos incorporáramos al plan, estaríamos defraudando a los vecinos".

El mandatario getafense ya había generado malestar en la familia socialista la semana pasada al decir que era "una necedad" oponerse al metrosur, como habían hecho sus colegas de Leganés, Alcorcón, Móstoles y Fuenlabrada. La FSM insistió ayer en que sus municipios sólo se sumarán al Plan de Residuos si se les garantiza una "adecuada" gestión y financiación.