Siete asociaciones critican la política de Pezzi para integrar deficientes
Siete asociaciones malagueñas han puesto en tela de juicio la política de integración que Educación desarrolla en los centros educativos. Estos colectivos han acusado a la Consejería que dirige Manuel Pezzi de "concentrar" niños con minusvalías en algunos colegios para ahorrarse monitores, un sistema que, se quejan, además de atentar contra el derecho de los menores a ser escolarizados en escuelas próximas a su entorno, recarga a otros centros de alumnos discapacitados. "Estamos hartos de que se optimicen recursos a costa de nuestros hijos", protestó María José Llamas, portavoz de las asociaciones. El delegado de Educación, Juan Alcaraz, replicó: "Esos recursos se pagan con el dinero de los ciudadanos; hay que cuidar de que no se multipliquen inncesariamente". Las asociaciones que agrupan a paralíticos cerebrales, afectados de espina bífida, sordos, deficientes visuales, autistas, síndrome de Down y Prodeni pidieron que las autoridades andaluzas "recapaciten" ante el "parón" que sufre la integración de estos niños. Las organizaciones pusieron como ejemplo los colegios Victoria Kent y Tartessos, de Málaga, donde hay 38 y 8 alumnos minusválidos respectivamente. Según las organizaciones esta situación es generalizada en Andalucía, por lo que han transmitido su malestar a las consejerías de Educación y Asuntos Sociales, a los grupos parlamentarios y al Defensor del Pueblo. Alcaraz no comparte la demanda de las asociaciones: "Cuando se inició el proceso de integración, en 1985, estos niños iban a centros específicos, ahora están escolarizados en centros ordinarios. No optimizamos recursos ni hemos parado la integración; atendemos su escolarización lo mejor posible".
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