La juez del caso 'fondos reservados' investigará el patrimonio de Barrionuevo

El ex ministro del Interior José Barrionuevo se negó ayer a declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Madrid, Carmen Valcarce, en el sumario sobre presunta malversación de fondos reservados, pero le entregó un escrito en el que proclama su inocencia e insiste en que está en prisión debido a una "sentencia injusta". "Jamás, ni respecto a los fondos reservados ni sobre ninguna otra cuestión, ordené, consentí ni autoricé nada irregular o ilegal", subraya Barrionuevo en dicho escrito, y anuncia que dará "todas las facilidades" para que se investigue su patrimonio.

José Barrionuevo fue conducido desde la prisión de Guadalajara hasta el edificio de los juzgados madrileños, en la plaza de Castilla, a las cinco de la tarde, en un Ford Mondeo blanco, en el que accedió directamente al garaje del edificio. El ex ministro compareció brevemente ante la juez instructora, Carmen Valcarce; el fiscal Alejandro Luzón -hijo del fiscal jefe de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, que le acusó en el caso Marey- y varios de los abogados personados en la causa. Valcarce dijo a Barrionuevo que tenía entendido que deseaba acogerse a su derecho a no declarar, a lo que éste asintió. La juez, que, según fuentes de la defensa, no levantó la cabeza de las actuaciones en ningún momento, le preguntó después si deseaba presentar algún escrito, momento en el que el ex ministro le entregó un folio en el que explica sus razones para no prestar declaración sobre el uso que se dio a esos fondos durante su mandato por tratarse de una materia sometida a secreto oficial. Por último, la magistrada le notificó que va a iniciar una investigación sobre sus bienes y los de sus familiares cercanos, algo para lo que Barrionuevo había dado "facilidades" en el escrito entregado a la juez, y dio por concluida la diligencia.

Barrionuevo abandonó el edificio media hora después de su llegada y volvió a ser conducido a la cárcel. En el exterior de los juzgados, una treintena de militantes del PSOE se agrupaba tras una pancarta en la que las Juventudes Socialistas reclamaban su libertad. Entre los congregados se encontraba el senador Juan Barranco y el secretario general de las Juventudes, Óscar Iglesias.

La esposa de Barrionuevo, Esperanza Huélamo, declaró que su marido sigue siendo "víctima de un sucio ajuste de cuentas político disfrazado de investigación judicial" y que le parece bien que se investigue su patrimonio porque así se demostrará que su familia vive ahora de la solidaridad de sus compañeros.

"Sentencia injusta"

En su escrito, Barrionuevo insiste en que está encarcelado por una "sentencia injusta", que le condenó "sin pruebas de cargo": "La experiencia vivida en ese procedimiento me enseñó que de nada sirven las declaraciones o pruebas que no vayan en la línea condenatoria previamente fijada por aquéllos que realizan el juicio paralelo" Con independencia de su situación, Barrionuevo considera que la ley le impide declarar sobre los fondos reservados. "Si el Gobierno actual considera que el uso de los fondos reservados tiene que dejar de ser una materia secreta, y así lo acuerda, daré cumplida respuesta a las preguntas que se me formulen, al igual que estoy seguro que lo harán todos los que, antes y después que yo, fueron ministros del Interior", agrega.

Barrionuevo añade, sin embargo, que la obligación de no declarar sobre los fondos no le impide "proclamar" su "inocencia": "Jamás, ni respecto a los fondos reservados, ni sobre ninguna otra cuestión, ordené, consentí ni autoricé nada irregular o ilegal".