Hillary Clinton: "Sólo puedes seguir el consejo de nuestras madres, duerme bien y haz algo de ejercicio"
Ha sido otro día difícil en la presidencia de Clinton; pero Hillary Clinton sigue con sus funciones de Primera Dama. Vestida con un traje pantalón rosa, ha dado a conocer un nuevo sello que va a recaudar fondos para la investigación contra el cáncer de mama y ha hablado con un especialista en arquitectura sobre sus visitas a lugares históricos. Cuando nos encontramos en la biblioteca de la Casa Blanca, no delata la tensión que debe de sentir. De hecho, parece deseosa de hablar con las lectoras de Ladies" Home Journal sobre los complicados retos que afrontan las mujeres hoy en día. Pregunta: ¿Por qué hay tantas mujeres que siguen viendo mal a las mujeres enérgicas, sobre todo a las que se dedican a la vida pública?
Respuesta: Supongo que irá cambiando con el tiempo. Pero siempre han existido mujeres independientes. Todas tenemos ejemplos de abuelas y tías que controlaban su vida. Lo que sucede es que se consideraban excepciones. Creo que hace falta cierto tiempo para que las mujeres se sientan cómodas con los distintos estilos que adoptan al ejercer independencia y poder público. Ahora hay muchas que viven su vida y toman sus propias decisiones en puestos influyentes, tanto en el sector público como en el privado. Pero va a hacer falta algún tiempo para que la gente cambie sus criterios sobre lo que resulta adecuado y lo que no en una mujer.
P: ¿Qué consejos le da a Chelsea para ser una mujer en el siglo XXI?
R: Le digo lo mismo que a todas las jóvenes: que deben estar agradecidas por las extraordinarias oportunidades que tienen ahora, y que no existían cuando yo tenía su edad. Había becas que yo no pude solicitar, escuelas a las que no pude ir, empleos que nunca pude tener sólo porque era una mujer. Y no deben dar estas transformaciones por sentadas. Hay muchos países en los que se está intentando retroceder en materia de oportunidades para las mujeres.
P: ¿Algún otro consejo?
R: Una de las grandes ventajas que tenemos las mujeres en este cambio de siglo es que vamos a vivir mucho tiempo. Vamos a tener la oportunidad de hacer muchas cosas distintas con nuestras vidas. Y debemos saber que podemos beneficiarnos de una buena educación y tener la fuerza suficiente para tomar las decisiones necesarias. Si eso significa dedicarse a ser madre y ama de casa, o ser una profesional y no casarse, o intentar hallar el equilibrio entre nuestras obligaciones en el hogar y en el trabajo, tenemos que apoyarnos unas a otras en esas decisiones, y crear una cultura en la que las mujeres, de verdad, nos ayudemos. Si lo hacemos, descubriremos que tenemos más tiempo, menos tensiones y más libertad para tomar decisiones.
P: ¿Cuál cree que es el legado que dejará como primera dama?
R: La gente me lo pregunta últimamente, y no tengo ni idea. Supongo que porque sigo pensando en el presente y el futuro. A veces me dicen: "Seguro que se alegra cuando todo esto se termine". Y siempre respondo: "Muy al contrario, ha sido una experiencia extraordinaria". De modo que no pienso tanto en mi legado como en lo que puedo hacer cada día para contribuir al futuro.
P: ¿Y no vuelve la vista atrás?
R: No, la verdad es que no.
P: Usted y su familia han sido materia de más cotilleos que nadie. ¿Cómo lo sobrelleva?
R: Bueno, supongo que llevo tantos años en la esfera pública que he desarrollado una filosofía sobre las críticas y los cotilleos, que consiste, fundamentalmente, en prestar seria atención cuando hay algo que lo merece pero no tomármelo como nada personal.
P: Sé que ha dicho que su lema preferido era el de Harriet Tubman, "sigue adelante". ¿Qué técnicas utiliza para "seguir adelante"?
R: Estar con personas que te apoyan y te quieren es lo primero. En segundo lugar, no hay que dejar de reabastecer los recursos espirituales de cada uno. Muchas veces me descubro citando la oración: "Querido Dios, sé bueno conmigo. El mar es muy ancho y mi barca, muy pequeña". Sólo se pueden controlar las cosas hasta cierto punto. No puedes dominar la maldad de otras personas, ni su ambición, ni sus motivos. Y seguir todos aquellos consejos pasados de moda que nos daban nuestras madres: dormir bien y hacer algo de ejercicio, que es lo más difícil para mí.
P: Señora Clinton, en todos los años que lleva usted en la vida pública, se la ha caracterizado de muchas maneras contradictorias. ¿Cómo se ve a sí misma?
R: Ésa es otra pregunta difícil para mí, porque no pienso en ella. Me considero alguien que intenta vivir lo mejor que puede. Y cometo errores, y no todos los días soy tan buena persona como me gustaría. Y no alcanzo los objetivos que me propongo. Pero intento seguir adelante, día tras día.
P: Ladies" Home Journal tiene 115 años de antigüedad. Hágame predicciones sobre las mujeres en los próximos 115 años.
R: Habrá cooperación entre las mujeres para que podamos ser más felices y tener menos tensiones en el cumplimiento de nuestras obligaciones más importantes, las que tenemos con nuestras familias, con nosotras y con la próxima generación. En mi opinión, algún día tendremos a una mujer en la presidencia, y espero que sea en los próximos 20 años. Y confío en que a las mujeres les parezca bien.
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