El miedo al voto racional

Llegó la campaña electoral. Te despiertas una mañana y descubres que, según algunos políticos que aterrizan como las aves migratorias sólo en elecciones, las personas que conviven habitualmente contigo son tus enemigos, que cuando hablas con alguien preguntas primero sus apellidos y su origen para seguir la conversación. Y te preguntas, ¿estoy viviendo en el mismo sitio que ayer? Aquí nadie va a hacer las maletas, pero no porque lo vayan a impedir desde Madrid, sino porque nadie lo va a intentar desde aquí. Todos los ciudadanos de Euskadi, ya sean de origen extremeño, gallego, andaluz, castellano..., tenemos nuestra opinión y nuestra opción política y nadie, ni en la más ruin de las demagogias, tiene derecho a llegar en campaña electoral y tratar de sembrar la semilla del odio o de una marginación que no existe. Buscar el voto a cualquier precio, despreciando incluso a sus propios electores tratando de hacerles pasar por borregos, está muy lejos de cualquier ética. Los que tenemos nuestro origen fuera de Euskadi y no renegamos de él, sabemos que es perfectamente compatible conservar la cultura de nuestros ancestros y respetar y defender la del país en el que residimos. Y desde luego, aquí nos sentimos partícipes de lo que desde las instituciones vascas se realiza en la mejora de nuestra calidad de vida, infraestructuras, sanidad.... Sería bueno que quienes vienen a darnos lecciones de convivencia miren de vez en cuando a su alrededor y comparen la diferencia de calidad del servicio que ellos prestan a sus ciudadanos; a lo mejor les entra un poco de vergüenza. Tratar de enmarcar la contienda electoral en el conmigo o contra mí, el tratar de empujar a ejercer el derecho a voto en base a buscar enfrentamiento entre los miembros de esta comunidad, poco dice del respeto que esos partidos políticos tienen de sus propios electores en Euskadi. Después del 25-O todo deberá volver a la normalidad, pero me preocupa que lo que tan alegremente se está diciendo deje su rastro traducido en rencores y malentendidos. No estoy en contra de que políticos de otras autonomías vengan a apoyar a sus compañeros de partido, pero sí de que vengan indocumentados, desconocedores de la realidad social en la que vivimos y sólo les preocupe el tratar de azuzar la discordia y la intolerancia. Votar en libertad, votar en conciencia, pero siempre sabiendo que este país no prescinde de nadie, sólo de quienes quieren prescindir de este país que es Euskadi y nos quieren imponer el voto irracional del miedo por miedo al voto racional.- . Presidente de la Irmandade de Centros Galegos en Euskadi. .