La Generalitat reducirá sus ingresos en 3.000 millones por las deducciones

El coste del paquete de medidas fiscales anunciadas ayer por la directora general de Tributos no es definitivo todavía, falta cuadrar algunas cifras, pero en términos generales se calcula que la Generalitat reducirá sus ingresos en algo más de 3.000 millones de pesetas. Las deducciones para minusválidos mayores de 65 años supondrán un coste para la Generalitat cercano a los 500 millones de pesetas. Las desgravaciones por la adquisición de la primera vivienda habitual en la Comunidad Valenciana representaron el ejercicio pasado, según datos provisionales, una pérdida de ingresos de 900 millones de pesetas. La exención del 95% del Impuesto de Sucesiones en caso de transmisión de una explotación agrícola será la medida más cara para la Generalitat, ya que los cálculos arrojan un decremento en los ingresos de 1.074 millones de pesetas. El único incremento de impuestos que aliviará las arcas públicas será el impuesto del juego, por el que la comunidad autónoma ingresará cerca de 300 millones más. Araceli Muñoz agregó que la Generalitat continuará con su política de reducir los impuestos directos a costa de los indirectos, que sólo gravan a los que consumen. Según la directora de Tributos, la Comunidad Valenciana fue la primera autonomía española que arbitró incentivos fiscales, con cargo al tramo autonómico del IRPF -ahora establecido en un 15%, pero en el futuro llegará hasta el 30%- para la familia, la vivienda y la tercera edad. Este último colectivo sería, en términos generales, el damnificado por las medidas anunciadas ayer, dado que pierden la deducción de 10.000 pesetas establecida el año pasado en beneficio de los mayores de 65 años con alguna minusvalía, que cobrarán, con independencia de su nivel de renta, 25.000 pesetas.