Aznar urge más flexibilidad laboral y un pacto sobre contratos a tiempo parcial

El presidente del Gobierno, José María Aznar, cree que el mercado laboral español tiene "elementos de rigidez sin parangón en la UE y responde a una legislación desfasada". Para avanzar en la flexibilidad, apuesta con fuerza por los contratos a tiempo parcial, y urge a sindicatos y empresarios a que cierren en breve un acuerdo. Aznar asegura que por ese camino "en cuatro o cinco años se invertirá el problema del paro". Ese optimismo se extiende a las cuentas del Estado, que "a medio plazo" presentarán déficit cero.

José María Aznar hizo ayer un balance positivo de la capacidad de crear empleo de la economía española, que ha generado más de 800.000 puestos de trabajo desde que él está al frente del Gobierno, y ha logrado la cifra histórica de 13,2 millones de ocupados, sólo comparable a los 13,16 millones de 1974, antes de todas las crisis económicas. Pero su reto ahora es "cambiar en cinco años el sesgo del paro" y que España se sitúe al nivel de los países de la UE en mejor situación.Para avanzar hacia ese objetivo, el presidente del Gobierno lanzó ayer una serie de propuestas en una jornada organizada por el Colegio de Graduados Sociales, en la que se debatía sobre Más y mejor empleo. Aznar considera necesario "mejorar y profundizar la reforma laboral de 1997", de forma que se corrijan las "rigideces" y se puedan crear más puestos de trabajo. Su respuesta "es avanzar en la estabilidad en el empleo" mediante una fórmula férreamente defendida por el Gobierno: "Impulsar un contrato a tiempo parcial estable realmente atractivo, con protección social", y que repare "la injusticia de condenar a personas a no crear o estabilizar una familia por tener unas reglas muy duras en el mercado laboral".

Ese contrato se negocia con los agentes sociales, y ya está prácticamente cerrado el facilitarle el acceso a una pensión contributiva. No obstante, quedan pendientes algunos puntos para cerrar un pacto, razón por la que ayer Aznar criticó las resistencias de los sindicatos. El presidente quiere tener ese contrato ultimado para fin de año, porque con ese tipo de reformas "en cuatro o cinco años podemos invertir el problema del desempleo".

Sobre la crisis financiera internacional, Aznar aseguró que no se pueden "trivializar las dificultades, y esos problemas nos afectan", pero matizó que España afronta la situación con una economía saneada, ya que "el euro ha empezado a dar beneficios". Para el futuro se comprometió a presentar un presupuesto equilibrado "a medio plazo".