El nuevo Plan General de Vitoria prevé construir 5.000 nuevos pisos cada año hasta 2002
El Ayuntamiento de Vitoria aprobará esta semana con carácter inicial el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el instrumento que marcará las líneas maestras de su expansión para los próximos ocho años. Su elaboración ha requerido más de dos años y necesitará otro más para ser definitivo. El plan gira en torno a un único eje: el crecimiento de la capital hacia el este (Salburua) y el oeste (Zabalgana). Si se cumplen las previsiones del plan -algo poco habitual-, se construirán casi 30.000 nuevas viviendas en los próximos ocho años, 19.000 de ellas en el primer cuatrienio, es decir, que Vitoria crecerá a un ritmo de 5.000 pisos anuales hasta el año 2002.
Vitoria, una ciudad oprimida en los últimos años por la escasa oferta de suelo y la tendencia alcista de las viviendas libres, encontrará por fin una zona -más bien dos- donde extenderse. Para ello resulta fundamental el convenio alcanzado el pasado julio entre el alcalde, José Ángel Cuerda, y los propietarios del 83% de las 470 hectáreas que comprenden Salburua y Zabalgana. Los particulares cederán todo su suelo al Ayuntamiento a cambio de beneficios en el aprovechamiento urbanístico. Sólo en esas dos áreas se edificarán 20.772 pisos. A esto se debe añadir una lacra del anterior Plan General: el polígono de Lakua. Este barrio del norte debió terminarse hace varios años, pero aún quedan 7.000 viviendas por construir. En 1999 estará casi completo. Además, existe suelo para más de mil pisos en las administraciones locales menores del municipio. El plan trata de cubrir la enorme cantidad de solicitudes de pisos que Vitoria tiene desatendidas. Un ejemplo: hay 4.400 personas apuntadas al próximo sorteo de 250 viviendas protegidas. "Estamos en un momento en que hay un número importante de jóvenes. Es lógico que haya unos años de una fuerte demanda y más tarde se reduzca", augura el concejal de Urbanismo, Álvaro Iturritxa. El PNV y Unidad Alavesa, socios en el Ayuntamiento, defienden este plan como "una apuesta importante", dice el teniente de alcalde, José Antonio Pizarro. En realidad, aparecen pocas novedades porque defiende un modelo de ciudad continuista, con amplias zonas verdes. De hecho, se ubicarán dos grandes parque junto a Salburua y Zabalgana, con 130 hectáreas. El resultado final no ha satisfecho a la oposición, que previsiblemente votará en contra del Plan General tanto en el debate de hoy de la comisión de Urbanismo como en el pleno monográfico del viernes. Alfredo Marco Tabar, portavoz del PP, teme que el Ayuntamiento reincida en "la desidia, la inoperancia o los errores que se cometieron en Lakua" y, además, no termina de creerse que se construyan tantas viviendas como se pretenden. El PP critica asimismo las dos velocidades con que se ha elaborado el plan, porque "durante dos años se ha procedido con total lentitud y de repente les han entrado las prisas". Básicamente, los socialistas comparten muchas de las opiniones de los populares. Su edil Patxi Lazcoz considera que el Plan General "trata de imposibilitar que se llegue a demostrar el desatino de todos estos años en materia de vivienda" dentro del Ayuntamiento.
