Muere calcinado un electricista de una empresa de Crevillent

Joaquín Soto Macià, un electricista ilicitano de 44 años, murió el lunes por la noche en el Hospital de Alicante a consecuencia de las quemaduras que sufrió en un accidente laboral ocurrido el pasado jueves. Al trabajador se le incendió la ropa, al parecer por un cortocircuito, y las llamas le causaron heridas de extrema gravedad en el 80% del cuerpo. El accidente se produjo sobre las 15.30 horas del pasado día 17 en la empresa Spumatex de Crevillent. Soto trabajaba en un cableado con unos alicates cuando recibió la descarga eléctrica y la ropa que llevaba ardió. El trabajador autónomo era socio de la empresa ilicitana Instalaciones Eléctricas Molina. El administrador de Spumatex, Francisco Pastor, precisó ayer que su empresa había contratado hace un mes los servicios de esta firma de electricistas para realizar algunas reparaciones en sus instalaciones. Tras el accidente, Soto fue trasladado a la unidad de quemados del Hospital General de Alicante, donde falleció el lunes. El sepelio se celebró ayer en Elche. La dirección de Trabajo informó que no abrirá una investigación para determinar las causas de la muerte de Soto porque el fallecido es autónomo y la inspección únicamente interviene cuando el accidente laboral afecta a un trabajador por cuenta ajena. Desde el mismo departamento se precisó que la averiguación de los hechos corresponde únicamente a la vía judicial, ya que para Trabajo este accidente no se contabiliza como laboral. El responsable de Spumatex precisó que ninguna institución ni compañía de seguros se había personado en la fábrica para investigar el caso. El responsable de CC OO en el Baix Vinalopó, Pascual Pascual, criticó la falta de medidas de seguridad y criticó el "oscurantismo" que ha envuelto este caso, ya que ni los propios trabajadores, ni la empresa ni la Administración han comunicado el fallecimiento al sindicato.