Ford apela a su peso en la economía para desbloquear el convenio colectivo

Los trabajadores de Ford España en Almussafes sacaron ayer su protesta por el bloqueo del convenio colectivo fuera de la factoría. Éstos secundaron nuevos paros y una marcha a pie por los alrededores de la fábrica. La réplica de la dirección de Ford a la ola de protestas fue clara: "Almussafes está ahora fuera de los planes de futuro de la compañía", sentenció el responsable de la planta, Juan José Ubaghs. El directivo recordó que la producción de Almussafes representa el 16% de las exportaciones valencianas.

Las negociaciones del XII convenio colectivo de Ford están en punto muerto. El comité de empresa mantiene su calendario de paros parciales e insiste en que la dirección dé el siguiente paso. Ésta atribuye la obcecación del comité a la cercanía de las elecciones sindicales e insiste en que ya ha retirado de la mesa los principales puntos de fricción con los sindicatos: la flexibilización horaria de la jornada laboral y el trabajo obligatorio los fines de semana. El comité de empresa de Ford España, que se ha fragmentado desde las pasadas elecciones sindicales, se niega en redondo que este convenio establezca únicamente la subida salarial para este año y el siguiente. Estas organizaciones insisten en negociar la reducción de jornada a 35 horas, en un plan de prejubilaciones para 700 empleados y en la conversión de contratos eventuales en indefinidos. "Las demandas son tan disparatadas, que si las aceptásemos, eso representaría una subida salarial del 39%", insistió ayer el gerente de la fábrica, Juan José Ubaghs. "Más que discutir con sindicatos parecen grupos de presión", agregó este directivo. Las consecuencias de este conflicto que lleva camino de enquistarse son, según Ubaghs, el trasvase en julio de 5.000 vehículos del modelo Focus, a la factoría alemana de Saarlouis, cuya plantilla aceptó además recientemente trabajar todos los fines de semana hasta final de año. Si los planes de la compañía para Almussafes eran antes del conflicto incrementar la producción diaria de vehículos de los 1.560 actuales a 2.100, las perspectivas ahora, con el conflicto laboral, son mantenerse en las actuales cifras. El comité está jugando, según Ubaghs, con el futuro de la factoría valenciana, además en un momento clave como es el lanzamiento al mercado del nuevo modelo Focus. "Almussafes está en estos momentos fuera de los planes de futuro de la compañía", subrayó el gerente, quien insiste en que la oferta de Ford supera con creces a los convenios colectivos suscritos por otras multinacionales del automóvil. "La broma les puede costar 350.000 pesetas a cada trabajador", calcula el director de Recursos Humanos de Ford, Joaquín Alcoy. Éste recuerda que los operarios de Ford pierden unas 26.000 pesetas por cada sábado no trabajado, así como 2,2 puntos del incremento salarial ofrecido por el seguimiento de los paros parciales. A todas estas argumentaciones de índole económica permanecen ajenos los sindicatos. Los paros de ayer, así como la marcha a pie convocada en cada uno de los turnos de la factoría, fueron secundados por el 80% de los empleados. Un portavoz sindical insistió en que el comité "jamás" ha tenido dificultades para trabajar en sábado, por lo que consideran que la dirección debe sentarse a negociar "un convenio razonable". Los sindicatos insisten en que la compañía automovilística ha aprovechado el lanzamiento del Ford Focus para intentar aumentar la productividad en Almussafes, objetivo al que el comité no se opone siempre que la dirección acceda a discutir sobre algunos de los 52 puntos incluidos en su plataforma reivindicativa, especialmente los referidos a la creación de empleo. Al día de ayer ninguna de las partes vislumbraba una nueva reunión de la comisión negociadora.