_
_
_
_

El Juli debuta el domingo en la plaza de Las Ventas lidiando seis novillos como único espada

"Nunca te puedes creer lo que dicen de ti", manifiesta el torero, que tiene 16 años

Apenas lleva un año sobre los ruedos y ya ha agotado el manual de hipérboles socorridas. De Julián López Escobar El Juli, de 16 años, ya se ha dicho todo. Una única temporada en España ha servido para auparle a lo más alto y convertirle en la revelación, el esperado o el mismísimo Pimpollo, que no es sino uno de los nombres de Cristo. El universo de la hipérbole taurina es así. Este domingo El Juli se presenta solo, en Madrid, con seis novillos. El próximo día 18 José Mari Manzanares le dará la alternativa en Nimes (Francia), en presencia de Ortega Cano.

Cuentan las crónicas que Joselito el Gallo se puso delante de una becerra cuando apenas contaba ocho años. Las mismas crónicas refieren que el animalillo asustó de tal manera al mítico diestro que se negó a seguir. Con la misma edad, El Juli aprovechó el ágape de su primera comunión para demostrar a sus familiares y amigos que quería ser torero. Una festiva capea fue la ocasión. "Tuve la sensación de que me gustaba", dice el novillero. No se asustó. Ahora, pasado un siglo desde la hazaña de su colega sevillano, este madrileño del barrio de San Blas se presenta en Las Ventas, para lidiar seis reses de diferentes ganaderías."Hablan y dicen tantas cosas. Es muy bonito que te reconozcan lo que haces, pero nunca te lo puedes creer del todo. Lo importante es ir a más", comenta. Pese al educado pudor, las cifras que presenta El Juli son espectaculares. Cuando el día 18 tome la alternativa, llevará apenas medio centenar de novilladas en España y 80 en América. Todo seguido en una exhibición de rapidez poca veces contemplada. De por medio, cuatro salidas a hombros en la Monumental de México y una larga lista de triunfos.

"Llego a Madrid muy ilusionado, contento y mentalizado. Es un sueño", dice serio, con la contundencia lacada en rutina de los más veteranos. En su currículo sólo le falta Las Ventas. Desde mucho antes de su debú mexicano con caballos en marzo del año pasado, el chaval Julián soñaba con pisar ese ruedo. El año siguiente a la comunión, su abuelo le llevo a la Escuela de Tauromaquia de Madrid. "Desde entonces, mi vida era ir al colegio por la mañana y a la escuela taurina por las tardes", afirma.

Sus formas ya se dejaron evidenciar desde muy temprano. Quizá, demasiado pronto. Su viaje al otro lado del Atlántico fue motivado por la edad. Allí, no existen las restricciones españolas que sitúan el mínimo legal para enfrentarse a un novillo en los 16 años. En Francia, que prohibe la participación de menores de la citada edad en espectáculos de pago, el asunto llegó a mayores y tuvo que vadear una denuncia por falsificación del carné de identidad. "Un malentendido, nada más", zanja El Juli.

En cualquier caso, nada le impidió triunfar de forma ruidosa tanto en México como en Francia (de cinco veces que estuvo en Nimes, en cuatro salió por la puerta grande). "Por eso tomo allí la alternativa", dice.

Su presencia en cosos ibéricos se zanjó con el triunfo en la feria de Castellón. Luego, Sevilla, Zaragoza, Granada, Santander... "Poco a poco voy consiguiendo lo que quiero", comenta, "aunque tengo que mejorar. Al fin y al cabo, estoy empezando".

Ahora, el esperado -su nombre sonó con aire de protesta por su no inclusión en San Isidro- llega a Madrid con todos los honores. Lidiará novillos de Victorino Martín, Samuel Flores, El Torreón, Alcurrucén, Daniel Ruiz y Torrestrella. "En estos casos lo importante es no caer en la monotonía", afirma. "Hay gran número de quites y la gente pide variedad". De entre todos los astados sólo uno merece consideración aparte: "Es la primera vez que toreo un victorino". Y añade un recuerdo: "Por supuesto, todo se lo dedico a mi madre".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_