"Señor presidente, manténgase lejos de nuestras hijas"
La indignación por el comportamiento de Clinton ya ha llegado a la calle. Desde los vidrios tintados de su limusina blindada, Clinton puede contemplar a los manifestantes que le esperan allí donde va con carteles que rezan: "Apártate de nuestras hijas", "Estás despedido", "Es la hora de dimitir" o "Fuera", informa Javier Valenzuela. Es lo que ocurrió el lunes, cuando Clinton fue a inaugurar el curso escolar a Silver Spring, un barrio residencial de clase media al norte de Washington, situado en el estado de Maryland. También hubo gente que le aplaudió, pero entre ellos no estaba el gobernador del Estado, el demócrata Parris Glendening, que no quiere ser visto junto al presidente. En muchas partes de Estados Unidos surgen piquetes que piden al Congreso que comience ya el proceso de destitución de Clinton.
