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Los profesores "despedidos" piensan dejar las actas de examen sin firmar

Día de nervios, charlas de pasillo y reuniones frenéticas en la Facultad de Ciencias de la Información. Los 59 profesores asociados que pueden perder sus puestos de trabajo (el rectorado ha decidido no renovar sus contratos) analizaron ayer qué estrategia seguir para que las autoridades académicas reconsideren este tijeretazo a la plantilla. En numerosos departamentos se avaló la posibilidad de corregir los exámenes de septiembre, pero dejar las actas sin firmar para provocar así un "colapso administrativo". Otro sector de los afectados abogaba por esperar a la reunión que el próximo miércoles mantendrá el rector, Rafael Puyol, con los directores de departamento, puesto que la máxima autoridad académica aseguró el jueves que intentaría recortar a la mitad la lista de damnificados. En cualquier caso, los asociados recibieron el apoyo de algunos profesores titulares y de CC OO. La decisión del rectorado de la Complutense afecta a 90 profesionales, de los que las dos terceras partes se encuentran adscritos a Ciencias de la Información. Muchos de los profesores asociados llevan más de diez años impartiendo clases en la universidad. El decano de Ciencias de la Información, Javier Davara, pidió ayer a Puyol que reconsidere su postura, de forma que el reajuste "no afecte a nadie, o al menos afecte a un número de profesionales lo menos significativo posible". En este sentido, al rector le empezaron ayer a facilitar su trabajo: según distintas fuentes, al menos cinco profesores, muy afectados por la tensión que se respira estos días en la Ciudad Universitaria, comunicaron a sus compañeros que preferían no continuar con la carrera docente.Oficialmente, los profesores argumentan que en Ciencias de la Información persisten grupos con más de 200 alumnos, por lo que la disminución de plantilla en casi un 20% repercutirá muy negativamente en la calidad de la enseñanza. Ayer emitieron un comunicado en el que se amenazaba con "una espiral de movilizaciones y medidas de presión" en caso de que no se renueven los contratos. Sin embargo, algunos reconocieron en voz baja que uno de los argumentos de Puyol y su vicerrector de ordenación académica, Francisco José Portela, es bastante sólido: la plantilla en Ciencias de la Información se revelaría como "un poco hinchada" si los profesores titulares asumieran más horas lectivas.

Lo que ni unos ni otros perdonan es la "unilateralidad" y "alevosía" con la que el rectorado comunicó la decisión de no renovar los contratos, "por sorpresa y en pleno periodo estival". Por eso, la alternativa de no firmar las actas como medida de protesta cobró fuerza durante todo el día de ayer. Los profesores corregirán las pruebas y publicarán las calificaciones en los tablones de anuncios, para que los alumnos sepan si están aprobados o suspensos, pero no las harán oficiales, lo que puede colapsar la secretaría a la hora de formalizar las matrículas, pronostican los afectados.

PASA A LA PÁGINA 3

CC OO denuncia la falta de planificación universitaria

VIENE DE LA PÁGINA 1 Para el próximo martes se ha convocado en Ciencias de la Información una junta de facultad de carácter extraordinario en la que todos los colectivos docentes podrán explicar su perspectiva del problema. Un día después, Puyol y Portela se reunirán con los departamentos para decir su última palabra respecto a este conflicto laboral y académico.

Comisiones Obreras se refirió ayer con dureza a lo que está sucediendo en la Universidad Complutense. En un comunicado, la central sindical expuso su "rotunda oposición" al despido de profesores asociados, que vinculó a una supuesta "falta de planificación" en la universidad más grande de España. "No consideramos razonable", expone el sindicato en su nota, "que, sin datos de necesidades docentes, sin informar a la junta de personal y sin contar con los departamentos se envíen cartas a estos profesores para comunicarles que no se les renuevan sus contratos".

En un acelerado intento de organizarse, los afectados constituyeron ayer un denominado Grupo de Coordinación de Profesores Asociados para aunar criterios ante los días difíciles que se avecinan. Uno de sus integrantes, Fernando Peinado, apuntó a la raíz del problema al asegurar: "Contratar asociados es la vía fácil y barata de conseguir personal, pero al final pasa lo que pasa. Ahora somos nosotros, y con el tiempo serán otros. Hasta la Carlos III, a la que teníamos por ejemplo en muchos sitios, ha publicado estos meses unas interminables listas de plazas para ser cubiertas por asociados", se lamentó.

Peinado reclamó a las universidades que potencien la figura de los profesores ayudantes como cantera natural de los futuros titulares. El mundo del fútbol le brindó un símil para razonar su tesis. "Para llegar al Real Madrid, lo lógico es hacerlo desde el Madrid B [los ayudantes]. Pues bien, el equipo se está nutriendo ahora de jugadores del Leganés, por poner un ejemplo [los asociados]".

El rector de la Complutense, Rafael Puyol, explicó el jueves a los afectados que esta universidad, en la que ahora estudian unos 120.000 jóvenes, perderá a una tercera parte de sus alumnos a lo largo de la próxima década. En este sentido, los profesores de Ciencias de la Información intuyen que su caso es el primero de un reajuste generalizado. El decano de la facultad, Javier Davara, exclamó ayer: "Yo sólo confío en que no haya habido mala fe hacia nosotros. No creo que seamos ni la peor facultad del mundo ni la que menos cumple".

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