El alcalde acepta las dimisiones por desavenencias en el área de enseñanza
El alcalde de Barcelona, Joan Clos, aceptó ayer las dimisiones que a finales de julio formalizaron el consejero delegado del Instituto Municipal de Educación de Barcelona (IMEB), César Coll, y otros tres responsables de su equipo, informó ayer un portavoz municipal. Según diversas fuentes, la dimisión de Coll y de parte de su equipo se debe a constantes desavenencias con algunos de los cargos de más confianza de la presidenta del IMEB, la teniente de alcalde de IC, Eulàlia Vintró. Años atrás se produjeron ya desavenencias entre la teniente de alcalde y el equipo que procedía del equipo anterior, encabezado por la socialista Marta Marta. La alcaldía dejará vacante el cargo de consejero delegado del IMEB, según el mismo portavoz, dado que para la continuidad de la gestión de los centros municipales de enseñanza de momento se considera suficiente con el nombramiento de Daniel Resines como director de Planificación y Gestión de centros, en sustitución del también dimisionario Vicenç Tirado. El portavoz no quiso precisar los motivos alegados para la dimisión del equipo de Coll, aunque aseguró que "no hay enfrentamiento de partidos, sino disfunciones personales". El Ayuntamiento y portavoces autorizados del IMEB han asegurado que esta crisis en el área de Enseñanza del Ayuntamiento barcelonés -que cuenta con 70 centros de enseñanza- no interferirá con el inicio normal del curso escolar. Para el PP, en cambio, hay "guerra fratricida" que, a su entender, mantienen PSC e IC para controlar la enseñanza municipal, y que ha llevado a la "crisis" del Instituto Municipal de Enseñanza (IMEB). El concejal popular Emilio Álvarez destacó que el problema resulta especialmente "inadmisible" cuando sólo faltan 15 días para que empiece el curso escolar.
