Estremecidos
Han pasado 48 horas desde que estalló la bomba en Omagh. Vivimos en una isla pequeña y las heridas parecen muy cercanas a cada persona. Fue con un sentimiento de vergüenza y de confusión que escuché las noticias de los acontecimientos en Omagh. ¿Qué se puede conseguir derramando la sangre de nuestros hermanos, la sangre de los visitantes a nuestro país?He visitado varios sitios de España. Tengo unos amigos muy especiales en Cataluña: las amistades que entablé cuando trabajaba en Figueres los años 1996-1997. Algunos han venido a visitarme. Aquí la bomba nos ha dejado estremecidos. Espero que en el futuro podamos ofrecer a los españoles una bienvenida fuera de peligro.-
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