Almería, Málaga y Sevilla tiraron del empleo andaluz la última década
El dinamismo de la economía andaluza está localizado, principalmente, en tres provincias. Según un estudio de Analistas Económicos de Andalucía sobre la evolución del empleo en la década comprendida entre 1987 y 1997, solamente Almería, Málaga y Sevilla han experimentado un crecimiento superior a la media andaluza. Por el contrario, la estructura productiva de las provincias de Jaén y Córdoba, donde el sector agrícola tiene un peso muy importante, son las menos generadoras de empleo neto. El estudio concluye que existen importantes divergencias entre las economías provinciales andaluzas.
El análisis permite constatar el fuerte proceso de terciarización experimentado por la economía andaluza, de forma que el 65% de los ocupados contabilizados en 1997 trabajan en el sector servicios. La tasa de ocupación en el sector terciario ha crecido en los últimos 10 años en un 34,2%, más del doble que el aumento del empleo global. También ha crecido por encima de la media regional el empleo en la construcción, un 18,9%. En la medida que el sector servicios está más desarrollado en los distintos territorios, así es el comportamiento de cada provincia, lo que explica que solo Almería, Málaga y Sevilla hayan evolucionado por encima de la media regional. Y lo han hecho con importante diferencia. En el conjunto de los 10 años estudiados, el empleo ha crecido en Andalucía un 16,53%. Las tres provincias más dinámicas superan el 20% en la tasa de variación (en Málaga y Sevilla un 24% y en Almería un 22,6%). A la media andaluza se aproxima también Huelva (15%), mientras que el resto queda considerablemente alejada: 12% en Cádiz, 10% en Granada, 7% en Jaén y 5% en Córdoba. Oscilaciones Las diferencias se reflejan también en los datos de la última Encuesta de Población Activa, que permite comprobar que el paro no es sólo un importantísimo problema en la región, sino que ofrece oscilaciones considerables entre el 39% de Cádiz o el 20% de Almería. Estos datos son esgrimidos por los autores del estudio, junto a su propio análisis de la evolución, para concluir que existen importantes divergencias entre las economías provinciales. A estos datos de diferencias provinciales hay que añadir la preocupante precarización del empleo apuntado varias veces por el consejero de Trabajo, Guillermo Gutiérrez. No obstante, el estudio sostiene que desde 1992 ha existido un importante proceso de convergencia entre los distintos territorios por la aplicación de distintas políticas estratégicas que han permitido que en los últimos cinco años las diferencias en la creación de empleo entre las distintas provincias sean más tenues. Una de las conclusiones del estudio es que el efecto provincial tiene mayor incidencia en la evolución del empleo que el efecto sectorial. A este respecto sostiene: "Los resultados ponen de manifiesto que en seis de las ocho provincias el efecto provincial es inferior al sectorial, es decir, las variaciones en la variable empleo vienen explicadas en mayor medida por el dinamismo de los sectores productivos en dichas provincias que por su propia estructura productiva". Sólo en Málaga y Huelva la situación es diferente y el efecto sectorial recoge una mayor parte de las variaciones. Para Analistas Económicos de Andalucía, el importante peso del sector agrícola en la economía andaluza ha impedido que la variación del empleo sea más positiva que el 16,5% mencionado. Tanto la agricultura como la industria han conocido en los últimos años un proceso de destrucción de empleo, especialmente significativo en el campo (-22%) y más leve en el sector secundario (-3,21%).
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