Israel construye otras 5.000 casas para sus colonos en el Golán
El Gobierno israelí decidió ayer dar un paso más en su política de colonización y aprobó la ampliación de cuatro asentamientos en los altos del Golán. El plan fue concebido por el comité presidido por el ministro de Infraestructura, Ariel Sharon. La ampliación supone la construcción de 2.300 viviendas para colonos y de 2.500 apartamentos de descanso en Maale Gamla, Ramot, Kanaf y Had-Nes, con vistas al mar de Galilea, según relató el portavoz Raanan Gissin.
"Se ha tomado esta decisión, sobre todo, para impulsar el turismo allí y dar ímpetu al crecimiento y al empleo", declaró acerca de la decisión, que con toda seguridad soliviantará a Siria.
Israel arrebató los altos del Golán a Siria en la guerra de 1967 y desde entonces 15.000 judíos colonos se han asentado en este punto estratégico al norte del país, que se ha convertido en contencioso perpetuo entre los dos países. Desde que venció el derechista Benjamín Netanhayu en las elecciones de 1996, en las que se comprometió a mantener el Golán bajo control israelí, no ha habido diálogo entre los dos.
Confesión de un palestino
Por otra parte, el palestino Sadiq Howaida, detenido en Pakistán en relación con los atentados del pasado día 7 contra intereses estadounidenses en Kenia y Tanzania, ha implicado al millonario saudí Osama bin Laden en los actos terroristas. Bin Laden financió los atentados, que causaron 257 muertos y más de 5.000 heridos, según confesó en Nairobi el responsable del comando integrista, que ha reconocido haber actuado junto con otros cinco cómplices, tres de los cuales murieron en la operación. Sadiq Howaida, detenido el mismo día del atentado, ha revelado a la policía de Kenia y a los agentes del FBI norteamericano que dirigió y coordinó un comando de cinco hombres para perpetrar la operación contra la Embajada norteamericana en Nairobi. Las declaraciones del responsable del grupo terrorista han permitido a la policía localizar en Nairobi el hotel donde se alojó durante tres días el comando y donde montó el artefacto con más de ochocientos kilos de explosivos. Todo ello financiado por el millonario saudí Osama bin Laden.
En su confesión, el palestino detenido asegura que Bin Laden dirige desde su refugio de Afganistán un ejército de 4.000 a 5.000 integristas equipados con moderno armamento y preparados para la acción en al menos ocho países diferentes.
El financiero Bin Laden, convertido en el enemigo público número uno de Estados Unidos, se encuentra por ahora en lugar seguro bajo la protección del régimen de los talibán en Afganistán, que ha asegurado que no lo entregará y ha advertido a Washington que no intente capturarle.
El Ministerio de Exteriores afgano ha afirmado que Bin Laden es su huésped.
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