El Gobierno expone las condiciones para el desvío "ecológico" del Llobregat

El Ministerio de Medio Ambiente ha dado a conocer las condiciones a que habrán de atenerse las obras de ejecución del desvío del Llobregat. El pasado día 4 el ministerio aprobó la declaración de impacto ambiental del proyecto y ayer dio a conocer las líneas generales de su contenido. El Gobierno considera que el respeto a estas condiciones y la puesta en práctica de ciertas medidas correctoras garantizan la viabilidad "ecológica" del proyecto. Entre esas medidas destaca la modificación de la anchura del cauce de aguas bajas, que se reduce en 40 metros en el perfil próximo a la laguna de Ca l"Arana. Ocho condiciones específicas habrá de cumplir, además, el proyecto de obras previsto: modificación del cauce de aguas bajas y de la margen derecha de la llanura de inundación; protección de las aguas subterráneas, con la minimización de los niveles piezométricos y la protección del cauce fluvial contra la salinización y la contaminación; protección de los ecosistemas y de la zona especial de protección de las aves (ZEPA); creación y mejora de los hábitats naturales de interés, ampliación de la ZEPA y protección de los caudales del agua para el mantenimiento de las zonas húmedas y de vegetación; protección de la banda litoral, sin ningún espigón en sus márgenes; protección de la vegetación y de la fauna, concretamente en los pinares de Ca l"Arana, las junqueras halófilas de Ca l"Arana y Cal Tet, los carrizales halófilos de Ca l"Arana y la vegetación litoral de esta playa; continuidad de los servicios existentes: caminos rurales, líneas eléctricas y telefónicas, oleoducto y tuberías de abastecimiento, así como canales de riego y drenaje, y redacción de un plan de restauración ambiental y paisajística. Por último, el Gobierno prevé la creación de una comisión de seguimiento, vigilancia y control, y la elaboración de un plan de vigilancia ambiental. El canal de la Bunyola El informe del Ministerio de Medio Ambiente realiza además tres indicaciones finales sobre la cronología que deberán seguir las obras. Así, señala que los primeros trabajos han de ser la ampliación del canal de la Bunyola y sus compuertas, con objeto de incrementar la recarga del acuífero superficial y minimizar los posibles descensos del nivel freático que ocasionará la excavación del nuevo cauce. A fin, también, de minimizar el impacto sobre la fauna, se deberán realizar las obras de la margen derecha y de las zonas húmedas de la llanura de inundación con anterioridad a la excavación del nuevo cauce. Las medidas de saneamiento de los suelos contaminados deberán ponerse en práctica de acuerdo con los resultados de los análisis y con antelación a la ampliación del canal de la Bunyola. Los detalles de la declaración de impacto medioambiental serán publicados en los próximos días en el Boletín Oficial del Estado.