Un problema de costa a costa
El problema con la movida se repite cada fin de semana en la mayor parte del litoral andaluz. Huelva El Ayuntamiento de Lepe ha tenido que emprender medidas urgentes ante las molestias que la movida provocaba entre los vecinos de La Antilla. El Ayuntamiento ha acondicionado unos terrenos para los botellones, a unos 300 metros del pueblo. Antes, la movida se ubicaba en la zona de la playa, en pleno centro, y fueron muchas las quejas de los vecinos. Almería La gran movida portuaria de Almería se concentra en la dársena deportiva de Aguadulce, en Roquetas de Mar. Miles de jóvenes asaltan terrazas y pubs para divertirse a placer. La relativa lejanía de viviendas y núcleos hoteleros hace llevadero el desenfreno de decibelios y alcohol para los residentes en Aguadulce, aunque no así el resultado del campo después de la batalla por la suciedad. Granada Se han endurecido, por parte de algunos municipios, los controles sobre la actividad de los chiringuitos, especialmente en cuanto a ruidos se refiere.Hace unas semanas, el Ayuntamiento de Almuñécar cerró por unos días tres lugares de marcha por el ruido que provocaban. Además clausuró una tienda de golosinas por vender alcohol. Málaga En Benalmádena, los vecinos de Puerto Marina y Solimar son los más resentidos. Pero el ruido no sólo proviene de la establecimientos. El consumo de bebidas alcohólicas en la calle llevó al alcalde a finales de abril a dictar un bando el que prohibe tajantemente el consumo de alcohol en la calle, así como su venta ambulante de bebidas. Cádiz La zona de La Laguna es la más afectada por la movida. La concentración de jóvenes se prolonga hasta bien entrada la madrugada. Los vecinos han denunciado la situación. El Ayuntamiento comenzó a practicar el pasado mes de julio severos controles contra la circulación de ciclomotores y contra la venta de bebidas alcohólicas en almacenes y desde furgonetas.
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