Barberá vende un solar para pagar el sobrecoste del edificio de Foster
El consejo de Administración de la empresa municipal Aumsa, dependiente del Ayuntamiento de Valencia, aprobó ayer el pliego de condiciones para la venta de una parcela en el polígono de Ademuz que servirá para pagar el sobrecoste del Palacio de Congresos de Valencia que ha diseñado el arquitecto británico Norman Foster. El precio que ha fijado Aumsa -1.325 millones de pesetas- para la venta de esta parcela municipal coincide con el sobrecoste de la obra que se estrenó el pasado dos de julio. El Palacio de Congresos ha pasado de un coste inicial de unos 3.500 millones de pesetas a rebasar de largo los 5.000 millones.
Con la decisión de ayer, anunciada por el concejal de Urbanismo, Miguel Domínguez, tras el consejo de Administración de la empresa municipal, se pondrá en el mercado un solar de más de 7.500 metros cuadrados de planta y una edificabilidad de 33.000 metros cuadrados en la que está previsto que se construyan hoteles y diversos establecimientos comerciales. Todos los grupos de la oposición manifestaron su rechazo a la propuesta que aprobó el consejo de administración de Aumsa.
El PSPV, por su lado, instó al Ayuntamiento a frenar la venta del solar y pidió que el sobrecoste lo asuma la Generalitat. Miguel Domínguez no rectificó y explicó que los ingresos obtenidos por la venta se destinarán a "hacer frente al último pago del Palacio de Congresos".
Obras en Marchalenes
Aumsa también adjudicó ayer las obras de construcción del parque de Marchalenes por 778 millones de pesetas a la empresa Necso, en la que están integradas Entrecanales y Cubiertas, empresas que se fusionaron hace cerca de un año. La compañía se compromete a acabar la obra en 18 meses y a rehabilitar varias alquerías y las antiguas cocheras del ferrocarril metropolitano.
Por otra parte, Aumsa venderá a la empresa inmobiliaria Cartera Inmobiliaria, propiedad de Bancaixa, el 26% de la sociedad Actura, una de las empresas que participan en el desarrollo del Polígono de Ademuz. Por otro lado, el concejal de Urbanismo se refirió al modo de financiación del proyecto de prolongación de Blasco Ibáñez por El Cabanyal. Su coste, unos 10.000 millones en un periodo de unos 10 años, espera financiarlo el Ayuntamiento a través de un convenio suscrito con la Generalitat. Esta cantidad, según el Ayuntamiento, se recuperará una vez desarrollado el proyecto con la venta de suelo urbanizable.
Mientras, los grupos de la oposición criticaron la falta de un plan de vivienda a cargo del Ayuntamiento de Valencia si se compara con otras ciudades del resto de España que ya lo tienen en marcha. Formaciones como el PSPV pidieron su puesta en marcha de "forma inmediata" con los ingresos por la venta de las acciones de la sociedad Actura.
