Santa Pola acusa a Cruz Roja de no vigilar la playa el fin de semana

La decisión de Cruz Roja de retirar durante el pasado fin de semana el servicio de socorristas en las playas de Santa Pola ha provocado un gran malestar en el Ayuntamiento. Cruz Roja precisó ayer que en ningún momento se ha puesto en peligro la vida de los bañistas, y aseguró que el servicio se redujo "como medida de presión", ya que el Consistorio les adeuda tres millones de pesetas desde el 10 de julio. El alcalde de Santa Pola, Pascual Orts, del PP, considera que la actuación de la institución constituye una "irresponsabilidad", y no descarta suprimir para el próximo verano el convenio con Cruz Roja. Los puestos de socorro de las playas de Santa Pola, donde prestan su servicio unos 50 voluntarios de Cruz Roja, permanecieron todo el fin de semana cerrados. Aun así, el presidente local de esta institución, Francisco Blasco, precisó que los servicios de seguridad mínimos se cubrieron. "En cada una de las playas teníamos una lancha patrullando", aseguró. Blasco también precisó que el puesto de Cruz Roja en la zona de Gran Playa funcionó el sabado y el domingo, al igual que el retén que tiene esta organización en la localidad. "Le requerimos varias veces al Ayuntamiento que nos pagara, y como consideramos que estaba incumpliendo el convenio, le comunicamos por escrito que reduciríamos el servicio", añadió Blasco. La versión municipal es bien distinta. El alcalde asegura que Cruz Roja dejó de operar en las playas sin previo aviso. "Me parece grave y bochornoso lo que han hecho porque anteponen el dinero a la seguridad de los bañistas", dijo Orts. "Les habíamos comunicado que, por motivos burocráticos, el pago se retrasaría unos días y han actuado más como una administración de recaudación que como una organización social", añadió. El alcalde avanzó que el Ayuntamiento no descarta sancionar administrativamente a Cruz Roja, e incluso se plantea no renovar el próximo año el convenio, por el que el municipio paga anualmente 12 millones de pesetas. "El Ayuntamiento estudiará a partir de ahora la conveniencia de crear un grupo de Protección Civil que pueda asumir las tareas de socorrismo en los meses de verano", dijo Orts. Polémica en Elche El servicio de vigilancias en las playas también es motivo de polémica en Elche. El equipo de gobierno del Ayuntamiento ilicitano, integrado por el PSPV y EU, rechazó ayer en pleno la propuesta del grupo municipal del PP en la que se reclamaba la ruptura del convenio que el Consistorio tiene con la firma Escuela de Natación Máximo Miralles, SL. Para los populares, la empresa adjudicataria del servicio de socorrismo incumple los requisitos que solicitó el Ayuntamiento en varios capítulos, porque ha contratado personal que no dispone de la titulación requerida. Los portavoces del PSPV y de EU precisaron que no existen motivos, según los informes técnicos, para anular el convenio suscrito con la empresa.