"Lo mejor es un acorde de guitarra que llegue al sentimiento"
El inventor del armónico y la segunda voz por excelencia de la trova cubana trae estos días las vivencias de casi un siglo de música a los escenario andaluces, contenidas en las canciones de su disco Lo mejor de la vidaTuvo que ser Ry Cooder quien descubriera al gran público una generación irrepetible de músicos cubanos. La revelación que supuso el disco Buena vista social club propició la proyección internacional de verdaderos pioneros como Rubén González o Francisco Repilado, inventor del armónico, más conocido como Compay Segundo. Nacido en Siboney en 1907, trae ahora su arte que, en otros tiempos, compartió con históricos de la talla de Benny Moré, Miguel Matamoros o Sindo Garay. Pregunta. ¿Cuál es el secreto de la eterna juventud? Respuesta. La vida... a esa hay que cuidarla. Es importante no ser exagerado con nada, ni con el amor, ni con la comida. Debemos disfrutar las cosas según las admite el cuerpo. De lo contrario, vas perdiendo el gusto. Y siempre pensar en el mañana: el hombre que se arrincona, pierde hasta el habla. P. ¿Qué es Lo mejor de la vida? R. Es un disco muy bonito, nada ambicioso, que trae muchos valores artísticos como Martirio, Silvio Rodríguez, Pío Leyva, Omara Portuondo... es una obra de recopilación. P. Y en su escala de valores, ¿qué es lo mejor? R. Yo valoro mucho la música. No la cambio por un cañonazo, mejor un acorde de guitarra que llegue al sentimiento. No hemos nacido para destruir a nadie, sino para disfrutar de la belleza del mundo. P. ¿Tiene miedo de que cante el manisero? R. Así decimos cuando se muere la gente... (risas). No, en eso no hay que pensar. La muerte llega como llega la vida, sin que nos demos cuenta. Vive lo mejor posible, no haciendo daño a nadie, y si puedes deleitar, ésa es la vida. P. ¿Qué siente cuando su música suena en Japón? R. Siento que lo que he hecho ha gustado, y eso me alienta para seguir trabajando. Si lo que hago no gustara, me retiraría. P. ¿Ha sido la música el arte más desarrollado en Cuba? R. Sí, allá tenemos una cosa que deberían tener todos los pueblos, que es la trova. Es la base para forjar nuevos valores artísticos, casas en las que se reúne la juventud a cantar. Eso engrandece el arte y lo promociona. Es importante también que venga gente de fuera, para enriquecer. P. ¿Quién marca la clave en la música cubana actual? R. Para la grabación de mis discos, yo (risas). Yo hago la selección y cuido que se interprete bien. En la música cubana hay muchas claves, hay salsa y hay bolero y canciones libres, rumba, cantos africanos... P. ¿Es usted religioso? R. Soy católico, apostólico y romano (risas). Tengo muchos santos. Me gusta la Virgen de la Caridad del Cobre, y le saqué una canción a la Virgen del Pino, aquí en Ferrol. P. ¿Y cómo esperan que le paguen su devoción? R. Los santos existieron. La mejor aspiración de una persona es ser santo. P. ¿Como Santa Cecilia, patrona de la música? R. Pudiera ser que con el tiempo dijeran: "Patrón de la Música, Compay Segundo". Porque mi Chan chan es patrimonio del mundo.
Compay arrasa en Sevilla
Las mujeres le adoran. De pie ante el escenario se le acercaban para y corearle -"¡Torero, torero!"-, pidiéndole una más. Después, algunas asaltaron el camerino para conseguir un autógrafo de este cubano que a sus 91 años posee una sensualidad que muchos de 30 quisieran para sí. "Tantas mujeres bonitas y yo no tengo ninguna", se lamentaba. Compay Segundo, arrasó la noche del sábado en el concierto que ofreció, con Martirio como artista invitada en el Festival de Itálica. Las localidades para la actuación, que se celebró en el patio de la Diputación de Sevilla, se agotaron dos días antes. Un millar de asistentes se deleitó a ritmo de son durante más de dos horas. Compay Segundo y sus muchachos -Hugo Garzón, primera voz y maracas; Benito Suárez, guitarra, y Salvador Repilado, contrabajo- entraron poco a poco. "En la música, como en la vida, hay que empezar por lo suave y después....", comentó mientras agarraba su armónico (un híbrido entre guitarra española y tres cubano inventado por él) con socarronería. Con Martirio, Compay cantó los dos temas que han grabado juntos en su último disco: Juliancito (Tu novia te botó), un son flamenco de hace medio siglo, y el bolero Es mejor vivir así. "Todavía no se han cansado, resisten ustedes", y así hasta el final cuando todo el público rompió a cantar Guantanamera.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.