NICOLÁS GARCÍA MIEMBRO DE LOS SILENCIOSOS "Muchos "blusas" se olvidan de su función y buscan sólo divertirse"

Nacido en Valencia hace 52 años y criado en Navarra, Nicolás García es más vitoriano que nadie. Avala este hecho su condición de blusa, que tiene desde hace 38 años y le convierte en uno de los más veteranos, y su irremediable "amor" por una tierra en la que vive desde que tiene uso de razón. Tanto tiempo integrado en cuadrillas (actualmente en Los Silenciosos) le otorga cierta autoridad para criticar el comportamiento poco ortodoxo de algunos de sus más jóvenes compañeros que "prefieren divertirse ellos a animar las fiestas". Pregunta. Desde que es blusa ¿se ha perdido alguna vez las fiestas? Respuesta. Ninguna desde hace 38 años. Cuando estaba haciendo la mili en Canarias me cogí un avión y me vine sin tener permiso. Luego me arrestaron pero no me importó porque lo importante era estar aquí para La Blanca. Ahora mismo estoy de baja en el trabajo y aunque me sancionen me da igual. Además salgo todos los días. Cuando me pongo la blusa ya no me la quito hasta que todo termina. Me gustan las fiestas y tengo que estar, no puedo evitarlo. P. ¿Se imagina unas fiestas de La Blanca sin blusas? R. No, los blusas somos parte esencial de las fiestas de Vitoria. El problema es que las cosas han cambiando mucho. Antes estábamos para animar a los demás, ahora hay muchos que sólo se preocupan de pasárselo bien ellos mismos. P. ¿Cambiaría algo de la actividad actual de los blusas? R. Sí. Creo que nos centramos demasiado en el centro de la ciudad y descuidamos el resto. Pienso que habría que hacer un calendario que contemple varios recorridos por los barrios, de esta forma todo Vitoria viviría la música y las fiestas de los blusas. P. ¿Qué opina su mujer de una actividad que le hace desaparecer de su casa durante seis días? R. Yo no hago lo que otros. Vivimos las fiestas juntos. Hasta el años pasado ella salía de neska conmigo. También con mi hija que casi antes de nacer ya era neska, con 21 días salió con el traje. Mi mujer es andaluza y, aún y todo, desde que nos casamos decidió salir conmigo en la cuadrilla. P. Muchos blusas se quejan de que salir en una cuadrilla es muy caro. R. Yo creo que no. Por ejemplo salir hoy, con corrida de toros y comida, me sale 5.000 pesetas y en fiestas ronda las 21.000. Creo que es una cifra perfectamente asumible. Además hay mucha gente que no va a los toros y con eso se ahorran parte del dinero pero no es plan, porque no se trata de ir cada uno a su aire. El que es blusa, aunque esté jodido, tiene que salir todos los días. Antes, a los que se desmandaban se les quitaba la blusa pero ahora eso no vale porque cada uno paga su cuota y si les llamas la atención por su comportamiento alegan que nadie puede echarles.