Malestar por el adelanto del fallo

La anticipación ayer por este periódico de algunos aspectos de las penas que el tribunal ha decidido imponer en la sentencia del caso Marey a Barrionuevo y Vera provocó un fuerte malestar entre los magistrados del tribunal.El fiscal José María Luzón declaró, al valorar la noticia publicada por EL PAÍS, que lo consideraba una "deplorable filtración" y "una vergüenza" que se hubiese producido, "porque no puede haber partido de una secretaria o de una mecanógrafa".

El magistrado Gregorio García Ancos declaró a Onda Cero que se sentía "indignado": "En cada deliberación hicimos un pacto de caballeros de no decir absolutamente nada", dijo el magistrado, quien se mostró partidario de abrir una investigación. "El lunes, que nos reunimos, seré el primero que lo proponga". El también magistrado Roberto García Calvo habló de "ataque al tribunal".

Las asociaciones de jueces y fiscales expresaron su preocupación por la anticipación del fallo y algunas pidieron que se investigue. El presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura, Santiago Martínez-Vares, no consideró oportuno opinar sobre una sentencia "que no existe". Sin embargo, precisó que le "entristecía muchísimo" que se haya publicado antes de que esté redactada.

Jueces para la Democracia pidió al Consejo General del Poder Judicial que esclarezca los hechos si el autor fuera un magistrado.

El presidente de la Asociación de Fiscales, Miguel Colmenero, precisó que "aunque la Justicia es lenta siempre llega". El portavoz de la Unión Progresista de Fiscales, Carlos Castresana, calificó de "inexplicable" la anticipación.