_
_
_
_
Reportaje:

Los platos rotos de la Escuela de Cerámica

El PSOE y los alumnos de este histórico y olvidado centro municipal exigen al Ayuntamiento medidas que permitan su revitalización

La Escuela Municipal de Cerámica, una de las instituciones más antiguas del Ayuntamiento de Madrid (se fundó en 1911), atraviesa uno de sus peores momentos, según denuncia la oposición municipal. El claustro ha descendido de 60 a 10 profesores, asegura el PSOE. El centro carece de presupuesto propio, reconoce su directora, Margarita Becerril. Y los alumnos, a pesar de seguir un plan de estudios que dura cinco años y que fue aprobado en un pleno municipal de 1986 como de enseñanza superior, abandonan la escuela con un documento sin validez oficial.Unos 500 alumnos y ex alumnos exigen que el Ayuntamiento inicie los trámites para que esta escuela se adscriba a alguna universidad. Incluso están dispuestos a denunciar al consistorio por fraude. Dicen que se sienten engañados porque, según aseguran, el Ayuntamiento les creó falsas expectativas. "Se les ha exigido cinco años de estudios con un número de créditos [468]. Se les ha dicho que son estudios superiores, que toda la estructura de estos estudios es universitaria. Se les han exigido unos esfuerzos y unos requisitos que no se han visto reconocidos ni compensados con una titulación oficial. Cuando terminan, ni siquiera pueden optar a ser profesores de primaria", expone José Ramón Codina, el abogado que, si es necesario, defenderá ante los tribunales los derechos de estos estudiantes.

El grupo municipal socialista llevará al próximo pleno varias medidas encaminadas a relanzar este centro. "Desde que gobierna el PP no ha salido ni una plaza de profesor. La escuela funciona sólo con tres millones al año", denuncia el concejal socialista Rafael Simancas. Las propuestas que el PSOE planteará en el próximo pleno incluyen la conversión del centro en organismo autónomo y la dotación de un presupuesto propio, con medios humanos y materiales suficientes. Los socialistas también proponen dar mayor promoción pública a las enseñanzas y actividades de la escuela, y que se negocie con la universidad el reconocimiento oficial de su titulación.

La reivindicación de una titulación oficial tiene su origen en el convenio que en 1990 firmaron el alcalde de Madrid, Agustín Rodríguez Sahagún, y el rector de la Universidad Complutense, Gustavo Villapalos. Este convenio especifica que "es voluntad de las partes establecer una recíproca colaboración e iniciar un proceso que en su día culmine con la creación de un centro universitario adscrito a la Universidad Complutense".

Papel mojado

"Ningún concejal ha trabajado para conseguir ese objetivo", se queja Simancas. "Es un acuerdo que no ha servido para nada. Ha dado apariencia de oficialidad a lo que no lo tiene", dice el abogado Codina. "Cuando se firmó el convenio se habló de un centro universitario y de titulación universitaria. Dos años después empezaron a dar un certificado sin validez académica. Siempre hemos considerado que se trataba de un fraude", comenta, por su parte, Domingo Huertes, presidente de la Asociación Profesional de Ceramistas, que agrupa a los ex alumnos de la escuela.Mercedes Doval, vicerrectora de la Universidad Complutense, aclara que la homologación de este título es competencia del Consejo de Universidades. "En ese convenio se hablaba de la obtención de un título propio de la Complutense, que es lo que se da ahora a los alumnos que terminan sus estudios en esa escuela", asegura. Añade que se trata de un título equivalente a un master: "Nunca se les prometió que fueran a obtener una diplomatura", añade Doval. El concejal de Cultura, Juan Antonio Gómez-Angulo, responsable de este centro, no quiso comentar el tema.

La fundación de la Escuela Municipal de Cerámica está muy unida a la Institución Libre de Enseñanza y a las vanguardias de principio de siglo. La formación que se imparte siempre ha gozado de prestigio. Sin embargo, sus estudiantes no ahorran críticas al abandono municipal. "No sabemos si lo que quieren es que desaparezca esta escuela. No entendemos por qué están dejando que se muera", dice uno.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Los estudiantes pagan por un curso académico 60.000 pesetas. La escuela ocupa 3.000 metros cuadrados en el parque del Oeste, divididos en diferentes pabellones. Uno de ellos es el de la Florida, donde los alumnos exponen sus obras. Según la directora del centro, Margarita Becerril, la Escuela Municipal de Cerámica está tasada en 2.600 millones de pesetas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_