"Egin" suministró fondos para financiar una red secreta de captación de información para ETA

La empresa Orain, editora del diario Egin, suministró fondos para una operación consistente en montar una red secreta de captación de información denominada Sarea. Así se desprende de algunos documentos que obran en el sumario, entre los que figuran varios cheques, uno de ellos firmado por dos directivos de Egin y por importe de más de tres millones de pesetas y que presuntamente fueron usados para ese fin. Además el magistrado cuenta con el libro de las claves encriptadas de comunicación para descifrar los mensajes enviados a los comandos de ETA a través de secciones del periódico.

Fuentes de la investigación reconocen que todavía desconocen muchos datos de esa red secreta de información, aunque todos sus elementos eran personas que tenían una actividad aparantemente legal. Las mismas fuentes señalan que a imagen de esa estructura se pensaba montar una red paralela en KAS.Esta actividad estaba fuera de los cometidos del diario como medio de comunicación.

A pesar de ello, los registros realizados en las sedes del diario y de Egin Irratia no tenían como finalidad buscar información sobre este extremo, sino recabar datos sobre movimientos de capitales, contabilidad y estructura económica de las sociedades.

Mensajes a los comandos

El juez tiene en su poder el libro de claves para descifrar los mensajes que la dirección de ETA mandaba a sus comandos a través de varias secciones del periódico. Una de ellas era "Agurrak" (Saludos), una página de mensajes y contactos, en euskera y castellano, a la que podían escribir los lectores.Los mensajes eran utilizados también para comunicarse entre miembros de la banda y directivos del periódico.

No quiere eso decir que todos los mensajes que se publicaban sean sospechosos, sino que el libro de claves permite descifrar aquellas órdenes concretas que se enviaban como mensajes codificados a los comandos por ese sistema.

Este hecho, unido a los documentos que avalan las relaciones de Orain-Egin con KAS-ETA, permite sostener que el periódico como producto pertenecía a la banda y era utilizado como una parte más de su estrategia global dentro de la legalidad.

Las pruebas documentales, según las mismas fuentes, demuestran la dependencia orgánica del periódico y su editora de la dirección de ETA-KAS.

El personaje clave en las relaciones desde el lado del periódico era Xabier Alegría, administrador único de la sociedad, consejero de la misma y dirigente de KAS y representante de Herri Batasuna en las Juntas Generales de Guipúzcoa. Su interlocutor desde el lado del entramado KAS-ETA era en la mayor parte de las ocasiones el dirigente José María Olarra, aunque en otras ocasiones también Otegi se hacía cargo.

Igualmente se ha considerado como muy importante a José Luis Elkoro, presidente de Orain y que se encuentra en prisión como consecuencia de la condena impuesta a todos los miembros de la anterior Mesa Nacional de HB por delito electoral.

Otro personaje clave en el apartado de las finanzas era José Antonio Etxeberría Arbelaiz, considerado el máximo responsable de KAS en Guipúzcoa y hermano del dirigente de la Mesa Nacional de HB, Rufino Etxeberría. El dirigente de KAS fue detenido en la operación iniciada el 28 de mayo.

Fuentes de la investigación han informado que los hermanos Isidro y Patxo Murga, miembros del consejo de administración, así como Ramón Uranga, que era consejero y apoderado de la sociedad, tienen gran relevancia. También es significativa la intervención de Pablo Gorostiaga, miembro de la actual Mesa Nacional de HB y ex alcalde de Llodio (Álava). Julen Calzada, Maite Mendiburu, Manuel Aramburu o Carlos Trenor han sido considerados "piezas menores".