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Entrevista:

CÉSAR GONZÁLEZ MÍNGUEZ CATEDRÁTICO DE HISTORIA MEDIEVAL "La red urbana vasca medieval careció de características propias"

Las 69 villas fundadas en los tres territorios vascos entre mediados del siglo XII y finales del XIV tuvieron un origen perfectamente homologable con el desarrollo del fenómeno urbano peninsular y europeo y apenas ofrecen peculiaridades propias diferenciadoras. Así lo asegura el profesor de Historia Medieval de la UPV, César González Mínguez, que destaca el pragmatismo de los reyes medievales a la hora de aplicar ordenamientos jurídicos: "si algo funcionaba en un lugar, se lo apropiaban y lo aplicaban a otros sin mayores búsquedas ni complicaciones". "Así fue como villas alavesas y vizcaínas recibieron el fuero de Logroño, en su versión original o en su adaptación vitoriana, y San Sebastián el de Estella, que no era más que un heredero del de Jaca", explica. Pregunta. ¿No existen características propias destacables en la fundación de las primeras ciudades vascas? Respuesta. Entiendo que no. Los ordenamientos jurídicos que rigieron las villas vascas están inspirados en ordenamientos foráneos. El de Logroño, por ejemplo, que fue el que tuvieron las alavesas y vizcaínas, se otorgó en iguales términos a ciudades de muchos otros territorios de la Corona de Castilla. P. ¿Cuál fue la primera ciudad del territorio vasco actual? R. Salinas de Añana, en Álava, que recibió el fuero en 1.140 del rey Alfonso VII. La última fue Villareal de Urretxu, en 1.383. Entre esas dos fechas se fundaron otras 67 villas, unas como nuevos núcleos de población y otras en concentraciones ya existentes, que reciben el privilegio de villazgo y reciben un fuero. Ese tejido urbano será fundamental desde el punto de vista económico y político, puesto que esas villas, y su posterior integración en hermandades provinciales, institucionalizan ,a finales del siglo XIV, los tres territorios de la comunidad autónoma. P. ¿Se perfiló desde el principio el triángulo que forman Bilbao, San Sebastián y Vitoria? R. Sí. Fue además un marco de importancia excepcional en la economía de la Corona de Castilla, como punto final en la península de la gran ruta que llegaba desde Sevilla a través de Medina del Campo y Burgos. Las tras ciudades están estratégicamente situadas y ese triángulo se empezó a configurar a finales del siglo XIII para consolidarse luego a través del comercio de la lana castellana y el hierro, fundamentalmente vizcaíno. P. ¿Estuvo alguna otra de aquellas 69 villas iniciales en posición de haber sustituido a las que consolidaron finalmente como capitales? R. Con respecto a Bilbao, Bermeo, y también Portugalete, tuvieron su oportunidad. Lo mismo la tuvo Tolosa en relación con San Sebastián; y Salvatierra estuvo muy bien situada frente a Vitoria. En cierto sentido podríamos decir que Bermeo pudo ser Bilbao. De hecho, las condiciones fundacionales de muchas de aquellas ciudades fueron muy parecidas. Pero enseguida se perfiló como mayor la pujanza de las actuales capitales, que fueron adquiriendo dimensión, mientras otras quedaban paralizadas. Un ejemplo es Labraza, en Álava, que es hoy casi igual que en la Edad Media. Otras incluso desaparecieron por efecto de las pestes y se transformaron en despoblados. P. Muchas de las villas vascas nacieron, en lo que parece paradójico, en un momento de demografía descendente. R. Así fue, pero su fundación se vio estimulada sin embargo por la iniciativa de la propia población, muy diseminada y aislada en caseríos donde sufrían de una gran inseguridad frente a los abusos de la nobleza banderiza y los señores feudales. Para protegerse de ellos y de sus excesos, pedían al monarca concentrarse en un lugar determinado, al que se concedía un fuero y se dotaba de una muralla. A estas circunstancias obedecen las fundaciones de ciudades como Markina, Elorrio, Usurbil o Hernani, donde no hubo una presión demográfica o un especial desarrollo de actividad mercantil ni artesanal, pero sí desorden público e inestabilidad social, que movían a sus pobladores a buscar seguridad y protección. P. ¿La expansión de unas y no de otras la determinaron sobre todo factores defensivos? R. Más bien una confluencia de factores, tanto relacionados con posiciones militarmente estratégicas, como de comunicaciones o de crecimiento de una actividad.

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