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El 63% de los españoles no cree que la violencia en Euskadi tenga solución policial

Una encuesta encargada por el Ministerio del Interior ha revelado importantes diferencias entre la opinión de los ciudadanos vascos y españoles, y la política antiterrorista del Gabinete de José María Aznar. El 63% de los españoles, y de forma específica el 70% de los vascos consultados, expresaron su desacuerdo con el hecho de que la violencia sea un problema policial y de resolución igualmente policial, y la situaron en un plano más político. El Ministerio del Interior no acepta otro escenario que la victoria policial sobre el terrorismo.

El 77% de los vascos y el 65% de los ciudadanos del resto de España considera que la violencia en el País Vasco es un problema fundamentalmente político, según una encuesta encargada por el Ministerio de Interior. Unos porcentajes similares a los que ofreció la pregunta de si la solución a ese problema debe ser policial. La encuesta aborda varios aspectos relacionados con la cuestión de la violencia, incluida la negociación con ETA, y pone de relieve en la mayor parte de los casos, aunque no en el citado, significativas diferencias entre la opinión de los vascos y el resto de ciudadanos del Estado. También evidencia diferencias entre algunas opiniones de los españoles y la política que sigue el Ministerio del Interior en relación con la violencia.La encuesta fue elaborada por encargo del departamento de Jaime Mayor Oreja, y remitida el pasado diciembre a los grupos parlamentarios, aunque no en la totalidad de sus contenidos. En ella y frente a la opción de elegir la frase que sitúa la violencia como un problema político se apunta a la posibilidad de optar por definir la violencia como un problema policial y de resolución policial, cuestión con la que el 68% de los vascos y el 63,5% de los ciudadanos españoles se muestran en desacuerdo.

Desacuerdos

La encuesta del Ministerio de Interior revela que una clara mayoría de la población vasca, en torno al 70%, considera "desacertada, injusta e ineficaz" la política de alejamiento de los presos de las cárceles del País Vasco. Las únicas bases sociales de apoyo, aunque relativo, a la política de alejamiento son los electores del PSOE; el 38% la juzgan acertada, y del PP, el 42%. Sin embargo, entre estos mismos electores hay una proporción superior al 50% que la consideran como desacertada. La opinión del resto de ciudadanos españoles con respecto a la política de alejamiento es diametralmente opuesta, y allá donde los vascos dicen desacertado (69,9%) ellos dicen acertado (57,8%); donde los vascos injusto (68,1%), los ciudadanos del resto del Estado dicen justo (56,8%); y donde los vascos dicen ineficaz,( 68%), los demás españoles encuestados dicen eficaz (48,3%).Según el análisis de los autores de la encuesta, existe en esta cuestión un abismo entre la opinión vasca y la del resto de la ciudadanía española. "La gestión política de esta diferencia no debe perder de vista que, probablemente, la opinión española sería más fácil de hacer bascular, en un entorno deliberativo adecuado, que a la inversa, puesto que su reacción tiene componentes más de mecánica visceral que de racionalización efectiva". Sobre el futuro de la política penitenciaria, sólo el 31% de los españoles quieren modificaciones.

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