AIERT ALONSO PINTOR "En Euskadi hay artistas tan preparados como en otros países"

Aiert Alonso (Lekeitio, 1974), una de las jóvenes promesas de la pintura de Euskadi, muestra desde ayer una parte de su trabajo más reciente en C. M. Estudio de dibujo, grabado y pintura de Hondarribia, que ejerce la labor de mecenas de jóvenes que trabajan por despuntar en el mundo del arte. Su exposición, en la que se exhiben un total de 25 cuadros y seis dibujos, está dedicada a un tema monográfico: el fútbol. "Utilizo este deporte como excusa para trabajar en la relación que existe entre pintura y fotografía", afirma. El joven pintor investiga desde hace años este lazo, que él juzga inseparable entre estas dos manifestaciones artísticas. "La fotografía", precisa, "siempre ha tenido una influencia muy importante en nosotros. Ante cuadros abstractos el espectador nunca podría pensar que vienen de fotografías totalmente figurativas. Normalmente se tiende a tapar esa utilización; lo que yo hago es recalcarla". Los trabajos que presenta en esta pequeña galería ofrecen una visión seriada de distintas situaciones que se dan en los partidos de fútbol. Las perspectivas varían; en algunos de los cuadros el autor se sitúa detrás de la portería del guardameta; otros captan con todo vigor la sensación que ofrece una fotografía desenfocada. Todos buscan la plasmación del movimiento, alejado de sus primeros retratos "más estáticos". Los lienzos, con una primacía cromática que llena de color el espacio, se encuadran en lo figurativo. "No es que me disguste la pintura abstracta, la valoro tanto como la figurativa mientras sea coherente lo que plantea", señala. "Pero lo figurativo me da más facilidad para poder plasmar esas imágenes cotidianas y populares de la televisión. Y al pasarlas a pintura adquieren el rango de arte". Aiert Alonso, que tiene garantizada una exposición para el próximo año en una conocida galería donostiarra, pinta para sí, teniendo siempre bien presente al espectador de sus obras. Por el momento no vive del arte. Compagina su dedicación a la pintura con clases a niños y la descarga de pescado en el puerto de Hondarribia. Pero se siente afortunado: "he tenido suerte de que haya gente que apueste por los jóvenes y se haya fijado en mí", indica. Desde que en 1997 ganó el tercer premio en el concurso de pintura Imagínate Euskadi, ha realizado diversas exposiciones individuales y colectivas. Mostró su trabajo en el Espacio Abisal; sus cuadros compartieron espacio en la Galería Amasté de Bilbao junto a otros jóvenes artistas; expuso también en la Fundación Rodríguez-Acosta y la Galería Laberinto de Granada. Antes despuntó en Bellas Artes y tuvo la oportunidad de conocer el panorama artístico de Dublín y Oporto. Esto le permite afirmar: "En el País Vasco hay artistas jóvenes tan preparados como en otros países".