Católicos y protestantes inauguran la Asamblea del Ulster y nombran a Trimble primer ministro
Reunidos por fin bajo el mismo techo, los antiguos adversarios del Ulster firmaron ayer el flamante registro parlamentario de Belfast e inauguraron una Asamblea legislativa que busca reemplazar décadas de hostilidad y violencia con el diálogo político. Fue una ceremonia austera para un trámite histórico que otorgó bríos al proceso de paz en Irlanda del Norte en momentos en que las tensiones sectarias aumentan con las horas a raíz de las desafiantes marchas protestantes anunciadas en el Ulster para este fin de semana. La Asamblea fue elegida el pasado 25 de junio en las urnas.
El advenimiento del organismo legislativo que aglutina en 108 escaños a representantes del amplio espectro político norirlandés abre una nueva etapa en la larga e infructuosa búsqueda de una solución al conflicto que ha provocado más de 3.200 muertes en los últimos 30 años. Tal como estaba previsto, David Trimble, el líder protestante y probritánico del Partido Unionista del Ulster (UUP) fue elegido ministro principal del ente autonómico en la sesión celebrada en un edificio adyacente al Castillo de Stormont. Pero en una actitud sorprendente, el máximo dirigente del Partido Socialdemócrata y Laborista (SDLP), el veterano nacionalista católico John Hume, decidió nombrar a su lugarteniente Seamus Mallone como candidato para el segundo puesto de la Asamblea. Hume se disculpó invocando su abultada agenda como parlamentario de Westminister y del Parlamento Europeo.Trimble y Mallone deben ahora abocarse a la formación de un Consejo ejecutivo de 12 miembros que adquirirá funciones de gabinete ministerial del incipiente Gobierno autonómico. De acuerdo con el plan de paz firmado por los políticos en abril y ratificado por el referéndum de mayo, su principal misión será desarrollar vínculos económicos y culturales como primer paso para una nueva conexión política entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
Gerry Adams, líder del Sinn Fein, el partido que representa políticamente al proscrito Ejército Republicano Irlandés (IRA), dio el altamente simbólico paso de ponerse de pie para aplaudir el nombramiento de Trimble, uno de sus más enconados enemigos. "Éste es el espíritu de generosidad con el que entramos en esta Asamblea. Tenemos ante nosotros la tarea de trabajar con nuestros opositores y, en algunos casos, con nuestros enemigos", declaró. El efecto del gesto de Adams está aún por verse. Entre la serie de problemas con el que nace la Asamblea está la enorme presión protestante para que Trimble no establezca contacto directo con Adams.
Pero bastante más urgente resultaba anoche la cuestión de los desfiles protestantes que la Orden de Orange prepara para este fin de semana en su bastión de Portadown, al suroeste de Belfast. Ignorando una prohibición expresa, los orangistas amenazan con atravesar el barrio católico de Carvaghy Road, escenario en años pasados de violentos incidentes. Trimble mencionó la necesidad de desactivar el conflicto.
El líder unionista radical Ian Paisley, dejó claramente establecida su intención de frenar la aprobación de decisiones políticas con una larga perorata sobre cuestiones de procedimiento.
El funcionamiento real de la Asamblea puede toma más tiempo del que se espera, en gran parte a causa de la obstinada oposición protestante a que el Sinn Fein esté presente en el Ejecutivo mientras el IRA no destruya sus armas. El Sinn Fein insiste en que ello debe ser parte de una desmilitarización que incluya el fin del Royal Ulster Constabulary, la policía probritánica.
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