Los unionistas moderados proclaman su victoria en las elecciones de Irlanda del Norte

ENVIADO ESPECIALDavid Trimble, el moderado líder protestante del Partido Unionista del Ulster (UUP) vio como los resultados confirmaban su crucial victoria en las elecciones legislativas en Irlanda del Norte. El UUP se había asegurado 28 escaños en la futura asamblea autonómica de 108 miembros tras recuperar en el último momento terreno frente al arrollador avance del Partido Socialdemócrata y Laborista del dirigente nacionalista John Hume, quien finalmente obtuvo 24 escaños. Los contarios a los acuerdos de paz no llegaron a 30 asientos.

Con la finalización del escrutinio oficial, se ha confirmado que el UUP mantiene el título oficioso de principal fuerza política. Por tanto es probable que Trimble pase a encabezar el Consejo Ejecutivo de la Asamblea autonómica con el título de ministro principal o primer ministro.Hume, cuyo partido técnicamente ha ganado más votos pero menos escaños y que estuvo a punto de superar al UUP, probablemente será elegido viceministro una vez que la Asamblea quede constituida la próxima semana.

El líder protestante, que apoya el proceso de paz, confiaba en obtener por lo menos 29 escaños, los suficientes para ahuyentar la peligrosa posibilidad de que los protestantes radicalizados, encabezados por el Partido Democrático Unionista (DUP) de Ian Paisley, se conviertieran en el fiel de la balanza política en el Ulster. El DUP quería construir un bloque obstruccionista en el seno de la Asamblea a fin de impedir que Irlanda del Norte y la República de Irlanda forjen vínculos, como propone el histórico proyecto de paz firmado en abril y refrendado el mes pasado.

Paisley y los suyos ven esos lazos como una amenaza al futuro de la unión del Ulster protestante con el Reino Unido. Según fuentes políticas, sus aliados del Partido Unionista del Reino Unido (UKU) debatían anoche una ruptura con Paisley para entregar condicionalmente sus tres escaños al campo de Trimble, dijeron fuentes políticas. Tal maniobra, inesperada hasta ayer, consolidaría la posición de Trimble y asestaría un rudo golpe al DUP.

Trimble, que parecía haber recuperado la serenidad tras el nerviosismo que se había apoderado del UUP ante el avance de Hume y Paisley el viernes, admitió que su partido va a necesitar tiempo para recuperarse de las fracturas en las filas protestantes. "El camino no ha sido llano pero seguimos en él y vamos a conseguir nuestro objetivo", declaró a la prensa. "El asalto desencadenado por el DUP y otros elementos ha sido aplastado", proclamó.

Trimble tendrá que trabajar en estrecho contacto con el SDLP de Hume, que según los resultados emerge como la organización con mayoría de votos. Hume, uno de los arquitectos del proceso de paz en el Ulster, estaba claramente satisfecho con los resultados y prometió continuar trabajando por una reestructuración política.

"El pueblo ha votado por la paz", declaró y sus palabras se asemejaron bastante a las de Gerry Adams, el líder republicano del Sinn Fein, que recibió 18 escaños situándose como cuarta fuerza política del Ulster.

Mo Mowlan, la ministra británica para Irlanda del Norte, saludó la victoria de los sectores moderados calificando la elección como "un hito" en la historia del Ulster. "El pueblo ha vuelto a pronunciarse", afirmó refiriéndose al referéndum que el mes pasado dio un espectacular apoyo del 71% al proceso diseñado por Londres y Dublín para terminar con tres décadas de violencia en el Ulster. "Éste es un paso vital en dirección de la paz", agregó.

Entregar las armas

Una vez proclamados los resultados oficiales, probablemente el lunes, los nuevos legisladores comenzarán a trabajar inicialmente bajo la tutela de la oficina de Mowlan. Londres y los unionistas del Ulster están ansiosos por acelerar la aprobación de leyes para obligar a que el Ejército Republicano Irlandés (IRA) y las organizaciones paramilitares de lealistas protestantes rindan su arsenal como condición previa a cualquier gestión encaminada a una liberación anticipada de militantes presos.

Sin embargo, es posible que la nueva asamblea autonómica del Ulster se vea enzarzada antes en la volátil controversia sobre los desfiles protestantes en áreas católicas. Existen temores de que la temporada de desfiles se transforme este año en una verdadera prueba de fuego para el proceso de paz.