Gutiérrez dice que el control de la balsa de Aznalcóllar ha sido correcto

El consejero de Industria, Guillermo Gutiérrez, sostuvo ayer en el Parlamento que el control técnico y administrativo de la balsa de las minas de Aznalcóllar (Sevilla), cuya rotura provocó la riada de agua y lodos tóxicos que afectó al parque natural de Doñana, ha sido "totalmente correcto". Gutiérrez insistió en que la Junta no es responsable en el asunto ni por acción ni por omisión, mientras que la oposición, IU y PP, reclamó su inmediata dimisión o destitución por "negligencia".

En su comparecencia ante la comisión de Trabajo e Industria para explicar las actuaciones del Gobierno andaluz sobre los vertidos contaminantes de las minas de Aznalcóllar, Gutiérrez aseguró que la rotura "no es achacable por acción u omisión a la Junta" y reiteró que la administración "no ha escatimado" sobre las garantías de seguridad de la balsa. El consejero, que repasó todas las actuaciones realizadas desde las primeras denuncias, no precisó los motivos de la rotura de la balsa, pero dijo que las administraciones "han obligado" a la empresa Boliden a adoptar medidas para garantizar la seguridad del dique. Además, aseveró que éste se rompió por un sitio, la zona este, donde "no se habían detectado anomalías". "Ha sido un empresa líder y especializada, Geocisa, la que ha estado realizando los informes tranquilizadores, días y horas antes del suceso", explicó. En este sentido, recordó que el recremimiento de la balsa y las condiciones de seguridad se realizaron con "arreglo a la normativa", y que la Administración central estaba "al corriente" de las incidencias de la balsa y de las filtraciones de agua al río Agrio, afluente del Guadiamar. El consejero de Industria subrayó que el Instituto Tecnológico Geominero emitió un informe de contraste respecto al de Geocisa donde se dictamina como "positivos" los factores de seguridad y estabilidad de la balsa. El diputado del PP Miguel Calvo acusó al consejero de "negligente por no ejercer sus responsabilidad", que extendió al actual consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, que fue titular de de Industria desde 1994 a 1996. "Se han limitado a recoger informes de una empresa privada que tenía que ser vigilada en una actuación ineficaz e irresponsable de la Junta", señaló. Francisco Ríos, de IU, afirmó que el consejero "merece el cese porque ha bajado la guardia o ha dejado pasar al enemigo", en referencia a Boliden. Le acusó de "prohibir o impedir" la inspecciones de la Consejería de Industria a Boliden a quien, según el, "está defendiendo para defenderse a sí mismo". Ríos sostuvo que la Junta, "con su actuación, ha enlodado a la autonomía andaluza por dejación de funciones". El diputado del PSOE Juan Torres afirmó que IU y PP "difaman" en una actitud de "carroñeros políticos" y aseguró que la Junta "ha cumplido con su obligación incluso más de lo que debía".