Patrimonio retrasa la privatización de Trasmediterránea hasta que la UE decida sobre el concurso de sus líneas

La privatización de Trasmediterránea se retrasará. La Sociedad Estatal de Participaciones Patrimoniales (SEPPA) ha pospuesto la petición de informes preparatorios de la privatización y no dará este paso hasta que la Comisión Europea resuelva el conflicto que generó el procedimiento seguido en la convocatoria y adjudicación de las líneas que unen la Península con las islas y que actualmente explota Trasmediterránea. Éstas se adjudicaron en diciembre, pero a juicio de la Comisión Europea "el concurso infringe las directrices y el Reglamento de cabotaje".Fuentes de la SEPPA han reconocido que "no tiene sentido privatizar ahora la empresa cuando queda pendiente esta decisión de la Comisión porque tendría menos atractivo para los inversores y valdría menos". El problema de la sobreadjudicación de acciones de la última OPV de Endesa ha colaborado al retraso.

Fuentes del Ministerio de Fomento han señalado que la pasada semana enviaron la documentación solicitada por la Comisión Europea sobre el procedimiento y mantienen que el concurso fue "a todas luces legal". Esas fuentes añadieron que en todo caso no estaba previsto que se privatizara la empresa hasta el segundo semestre de 1998. Sin embargo, la SEPPA, una vez privatizadas las tres grandes firmas del grupo (Telefónica, Tabacalera y Argentaria) tenía prevista la privatización antes del verano.

El pasado 13 de mayo, la Comisión Europea propinó un severo varapalo al Gobierno español al publicar que el concurso era "poco transparente", tras la denuncia de una compañía privada que se sintió agraviada por el procedimiento. El Diario Oficial de las Comunidades Europeas recuerda al Gobierno español que "debe haber un procedimiento de licitación abierto y transparente que posibilite el desarrollo de la competencia". Los grupos de la oposición parlamentaria no ha desaprovechado la ocasión para criticar al Ejecutivo. José Segura, del grupo socialista, ha denunciado la falta de transparencia en la adjudicación del contrato y ha añadido que la actual gestión de la empresa está llegando a acuerdos con empresas privadas del sector para externalizar servicios y dejarles en mejor posición para cuando se privatice. La SEPPA precisa que la transparencia y profesionalidad practicadas con Telefónica o Argentaria se repetirán en la privatización de Trasmediterránea.