Juan Dolores Caballero dirige una "Bernarda Alba" brutal
La casa de Bernarda Alba, una de las obras más representadas de García Lorca, vuelve a los escenarios de la mano del director Juan Dolores Caballero. El montaje, que se estrenará mañana en el teatro Felipe Godínez de Moguer (Huelva), presenta la soledad de una manera "brutal" y cruda, sin concesiones, como hace en todas sus obras Caballero. Esta versión del drama lorquiano se ofrece dentro del programa Teatro a Través del Tiempo que está desarrollando el centro sevillano Territorio de Nuevos Tiempos (TNT). La casa de Bernarda Alba y Divinas palabras, de Valle Inclán, son las obras elegidas por Ricardo Iniesta, director del TNT, para representar el teatro moderno. "He hecho un ejercicio de síntesis, porque para mí Lorca esta obra está dentro del costumbrismo poético. Mi trabajo ha sido el de reducir los elementos temporales que tenía el drama, he dejado el dolor de la mujer en estado puro", explica Caballero. El lenguaje sin concesiones a la estética del director sevillano ha dado como resultado una obra mucho más corta que la original, en la que el movimiento escénico es muy importante y con una escenografía, de Antonio Sáseta, casi minimalista. "Mi propuesta habla del mundo ritual y religioso del sur. Aparece una religiosidad feroz que ha marcado la moral de los personajes, una moral que ellas mismas se autoimponen", explica el director que ha dado el papel de Bernarda a un actor: Juan Luis Corriente. "Es un espectáculo duro. Se trata de contar el dolor de las mujeres pero sin que en el escenario se oigan voces. El sufrimiento está muy contenido", añade.
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