Los socialistas exigen al Gobierno navarro que renuncie a su proyecto de reforma fiscal

La ejecutiva del PSN pidió ayer al Gobierno navarro que renuncie a su proyecto de reforma del IRPF, que los socialistas califican de "atentado a la progresividad del impuesto" y abra un debate político y social para sacar adelante una reforma tributaria "consensuada". El secretario general de los socialistas navarros, Juan José Lizarbe, señaló que UPN pretende "aumentar la desigualdad" fiscal imitando lo peor de la reforma del PP, lo que conllevaría una "preocupante" reducción de ingresos de entre 9.000 y 12.000 millones para la Hacienda Foral. El PSN rechaza, en concreto, la reducción del tipo máximo del 53% al 40% y la simplificación de la tarifa del impuesto de cinco a tres tramos. También repudia el tratamiento que se da a la adquisición de vivienda y la consideración como ahorro de cualquier incremento patrimonial (incluyendo la venta de acciones o fondos de inversión) independientemente de su origen. Considera, además, que la figura del mínimo familiar es "profundamente regresiva". Lizarbe fue contundente al calificar de "negligencia gubernamental" la dejación de UPN en la lucha contra el fraude fiscal. "Estamos ante un Gobierno y un consejero de Economía que aceptan resignados unos niveles de renta como si fueran estructurales y contra los que no se puede luchar", dijo el líder socialista, "lo cual es una auténtica irresponsabilidad". Por otro lado, la Cámara de Comptos de Navarra (órgano fiscalizador) ha criticado que la Administración tributaria foral tarda por término medio más de dos años en solucionar los recursos presentados por los contribuyentes en relación con el IRPF o el Impuesto de Sociedades.