El PSOE estudia la expulsión del candidato a las primarias de Huelva que aportó firmas de muertos

El PSOE de Huelva vive la convulsión interna más importante de los últimos años. La comisión ejecutiva municipal estudia la expulsión del partido de Damián Vidal, el candidato borrelista a las primarias, y de parte de su equipo tras haberse comprobado que entre sus avales había firmas de militantes fallecidos o que han negado rotundamente haber dado su apoyo a nadie. La Comisión de Garantías del PSOE onubense determinó el lunes suspender la candidatura de Damián Vidal, de 33 años, concejal en el Ayuntamiento onubense, debido a las irregularidades detectadas en las rúbricas.

La ceremonia de la confusión es total. La expulsión de Damián Vidal y de su número dos, el también concejal Francisco Casco, dejaría reducido a nueve ediles el grupo socialista en el Ayuntamiento de Huelva, algo que ahora no parece importar a los dirigentes del PSOE onubense. La dirección del partido intenta restablecer a duras penas la normalidad. El secretario general de la ejecutiva municipal, Rafael Ortiz, manifestó ayer: "Pedimos a los ciudadanos la más absoluta tranquilidad. Este es un partido centenario, que maneja, como valor fundamental, el de la ética. La Comisión de Garantías resolverá sin ningún tipo de problemas desde esa ética". Ortiz salió en defensa de la Comisión de Garantías, que preside la concejal Amelia León. "Es un órgano con independencia ética y transparencia total para resolver los conflictos sin influencia política. Es soberana para adoptar la resolución que proceda". Esa comisión ha encontrado 40 firmas duplicadas de militantes que no servirán ni a Vidal ni a José Juan Díaz Trillo, delegado provincial de la Consejería de Cultura, el otro candidato. La comisión, además, ha realizado 20 llamadas telefónicas a militantes cuyas firmas aparecían en los pliegos entregados por Vidal, y 19 de ellos negaron haber concedido su rúbrica a ese candidato, según Andrés Estrada, miembro del organismo disciplinario. "El partido está por encima de las personas que en un momento determinado se hallan en el candelero político. La Comisión de Garantías se eligió en un congreso y es un órgano soberano. Recordamos a los compañeros que también existe un reglamento disciplinario", aseveró Ortiz. Antonio Barrero, secretario de Organización de la ejecutiva municipal, advirtió ayer: "Vamos a ser contundentes en las medidas a adoptar. No nos duelen prendas. El partido, una vez que con toda rapidez y urgencia se saque de él todo lo que haya que sacar, se va a unir como una piña". Vidal, por su parte, no se arredró y replicó: "Es la Comisión de Garantías la que ha falsificado las firmas para liarme. No nos han dejado participar en el proceso de comprobación de los avales. Ha habido un pucherazo en toda regla". Vidal adoptó en todo momento el papel de víctima: "Me quieren machacar. Hay compañeros a los que no ha gustado que yo dijera que venía con el estropajo, el mistol y el cubo de agua para limpiar esto de gente que lleva enquistada 20 años en sus cargos y no quieren irse". Vidal y los suyos estuvieron al lado del actual secretario provincial, el renovador Barrero, en las luchas políticas contra el guerrismo en Huelva. Luego, por diferentes motivos, se sintieron defraudados con la actual dirección.