Arzalluz niega que pactara con HB la ley vasca del Deporte y llama "jacobinos" a sus críticos

El presidente del Partido Nacionalista Vasco, Xabier Arzalluz, se enfadó ayer mucho con las críticas vertidas desde el Gobierno central sobre el alineamiento de su partido, Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida con Herri Batasuna a la hora de votar una enmienda a la Ley vasca del Deporte. El dirigente nacionalista aseguró que su partido se unió a una propuesta de IU, a la que también se sumó HB. Nada más. Arzalluz instó a Madrid a tomar ejemplo de la nueva norma vasca, ya que, a su juicio, "España parece un circo deportivo de extranjeros".

El punto más espinoso de la citada ley es un artículo difuso para promover la participación internacional de las selecciones vascas e instar a las federaciones deportivas del País Vasco a independizarse de sus correspondientes españolas. Este punto, planteado originariamente por IU, ha dividido a la Cámara vasca de manera drástica. Los nacionalistas, incluida Herri Batasuna, por un lado y los demás a la contra. El alineamiento con HB sentó muy mal en Madrid que, de paso, ha amenazado con contrarrestar la norma vasca con otra ley. Arzalluz se revolvió ayer durante la inauguración del Día de Galicia en Euskadi y discurriendo por sus habituales derroteros argumentativos tildó de "jacobinos" a quienes han criticado la postura de PNV y EA en este punto. "Sobre todo lo que les gusta es azuzar al vasco". Por parte de Eusko Alkartasuna -el otro blanco de la mayoría de las críticas, ya que IU ha salido indemne de las distintas andanadas verbales-, su secretario general y consejero de Educación del Gobierno vasco aseguró que la posibilidad de que el Ejecutivo central presente un recurso contra la ley vasca del Deporte supondría "hacer oídos sordos a la voluntad mayoritaria del Parlamento y el pueblo vascos". "No puedo entender que el nacionalismo español sea tan absorbente y excluyente que no permita que pueda haber selecciones nacionales vascas, al estilo de lo que se hace en Gran Bretaña". El Reino Unido presenta históricamente esta peculiaridad en algunos deportes como el fútbol o el rugby, en los que compiten cada uno por su lado las selecciones de de Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Gales. Sin embargo, en otros deportes con menos peso de la tradición propia en las islas, el Reino Unido compite como una única selección, como por ejemplo en los Juegos Olímpicos. Error de estrategia El secretario general del PSE-EE, Nicolás Redondo Terreros, considera que las relaciones entre PNV y HB van más allá de un intercambio de posiciones acerca de la solución al problema terrorista y alcanzan un ámbito político integral. Redondo ha calificado de "error" la estrategia peneuvista porque, según ha insistido, "este país no tiene solución sin el acuerdo entre nacionalistas y no nacionalistas". El dirigente socialista ha basado su juicio en la aprobación de la Ley del Deporte propuesta por los socios nacionalistas del Gobierno vasco, PNV y EA, gracias al apoyo en los votos de los parlamentarios de HB, y los "llamamientos" lanzados desde el nacionalismo moderado a la coalición para que colabore en la devolución del texto del Reglamento de la Cámara que exige a sus miembros el acatamiento de la Constitución. Para el político vasco, los partidos nacionalistas han protagonizado en este apartado "una reacción virulenta, una reacción encabritada, una reacción montaraz contra algo que es razonable, basado en el sentido común", pero ha insistido en que lo "más preocupante" se halla en la posibilidad de que el texto se devuelva con "el apoyo de un partido anti-sistema". A juicio de Nicolás Redondo, estos hechos indican que "las relaciones entre los nacionalistas y HB trascienden a lo que en un principio eran esas relaciones. No sé si tendrán proyección después de las elecciones del 25 de octubre pero, en este caso, estamos viendo un acercamiento político, no sólo en relación con el problema del terrorismo, sino político, de conveniencia y de apoyo". El líder socialista destacó que esta unión puede llevar al nacionalismo a "sentirse fuerte" y "pasar como un rodillo" en el Parlamento "imponiendo tesis nacionalistas a los que no somos nacionalistas. Esto sería muy malo". Por su parte, el Partido Popular del País Vasco calificó ayer de "paso atrás" el proyecto de la citada y, por boca de sus secretario general Carmelo Barrio, dijo que se trataba "del primer mitin electoral conjunto de nacionalistas de todos los pelajes con la ayuda de una IU descabezada, confusa y contradictoria".