Un tribunal culpa a una mendiga y luego pide sus informes mentales

La Audiencia de Barcelona ha condenado a un año de prisión a Magdalena L.L., una indigente que vive en un banco de la avenida Diagonal de esta ciudad desde hace seis años y que en 1997 provocó la fractura de húmero de una mujer al golpearla con una madera porque se sentó en ese lugar sin su permiso.

La indigente, de 57 años, recibió en el banco la notificación para que acudiera al juicio, pero finalmente no se presentó, y ahora se le volverá a notificar en ese mismo lugar la sentencia.

El tribunal de la Sección Tercera considera en la sentencia que "teniendo en cuenta que se trata de una persona que vive en la vía pública y la reacción desproporcionada" que adoptó porque otra persona se sentó "en el banco público por ella ocupado con carácter permanente", la indigente debe de sufrir algún trastorno mental.

Por ese motivo, los magistrados solicitan a los servicios sociales del Ayuntamiento de Barcelona que le remitan informes sobre la indigente y censuran a las partes personadas en el caso, defensa y fiscal, porque "de manera incomprensible" no han aportado ningún documento sobre el estado mental de la acusada ni en la fase previa ni el juicio.

Ante la posibilidad de que exista un trastorno, el tribunal acuerda que se estudie la posibilidad de internarla en un psiquiátrico y que se le prohíba expresamente seguir viviendo en el banco.