Lizón denuncia la falta de atención a menores y enfermos mentales
El informe del Síndic de Greuges sobre 1997 urge la elaboración del plan de salud mental para la Comunidad Valenciana con la adecuada cobertura legal y presupuestaria. El Síndic recuerda la falta de previsión de las distintas administraciones ante la excarcelación de los enfermos mentales que permanecían recluidos en la prisión de Fontcalent ante la entrada en vigor del nuevo Código Penal, que fue aprobado a finales de 1996. También señala que las Cortes Valencianas instaron la definición del proyecto en abril de 1997 para cerrarlo durante el ejercicio pasado.
La recomendación del Síndic de Greuges sobre el plan de salud mental se arrastra desde el informe correspondiente a 1996. El informe recuerda los graves problemas que surgieron en las localidades de Quart de Poblet y Godella cuando el centro de San Onofre acogió a los enfermos mentales excarcelados de Fontcalent y denuncia "la imprevisión y la falta de coordinación de la distintas administraciones ante una situación en la que existió sobrado tiempo para afrontarla". El último informe elaborado bajo mandato de Arturo Tizón hace especial hincapié en la difícil situación que atraviesan los menores con problemas jurídicos por ausencia de centros adecuados para su atención y posterior reinserción. El Síndic recuerda la indefinición que afecta a los menores entre 16 y 18 años, desde la aprobación del Código Penal, y sugiere que los centros de recepción no se utilicen para internamientos prolongados. Los extranjeros requieren capítulo aparte. El informe establece que deben vincularse los derechos humanos a cualquier decisión política al respecto. PÁGINA 3
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